“La disposición del Congreso ha sido bastante profunda y tiene mucha lógica lo que planean; es con base en la evaluación de riesgos de cada persona, no es de un plumazo, no es binario, no es blanco-negro, sino que debe evaluarse la situación de riesgo de cada uno para asignar o no escoltas”, declaró Arturo Luján, presidente de Ficosec Chihuahua.
Prefirió no abundar demasiado en este tema, no obstante señaló que los delitos se miden desde el fideicomiso, precisando que hay unos a la alza y otros no, pero que se han tenido temas mediáticos que generan percepción de inseguridad.
“Una evaluación de estos cinco años de la actual administración es de sentimientos encontrados, no me atrevo a dar un número de calificación porque por un lado se ve el compromiso de algunas personas y grupos, pero tampoco encontramos los resultados que quisiéramos como comunidad”, refirió.
Destacó que específicamente el tema del homicidio no se está en la mejor de las situaciones, sobre todo en la zona de la Sierra Tarahumara, quedándose muy bajos los resultados en torno a las expectativas, por lo que esperaban que las condiciones en aquella región fueran mucho mejores.
“No me gustaría confundir la parte personal con la institucional, eso que quede claro, esto no es en contra de las personas, pero por supuesto no estamos satisfechos con algunos resultados, específicamente con el tema de homicidios”, apuntó.
Agregó que la pandemia no ayudó en cuestiones particulares: el tema de la violencia familiar vino a complicar mucho la contingencia que acrecentó la problemática.
“El hecho de estar confinados generó conflictos en todos los niveles y eso no tiene nada que ver con un asunto de ingreso familiar, fue algo generalizado. Hoy que ya hay mayor actividad económica, la situación no cambia, entonces es sujeto de estudio a ese fenómeno”, añadió.