El incremento de migrantes que están arribando al estado, también ha marcado una tendencia importante el registro dentro del albergue San Agustín, que en un día llegó a recibir a más de 500 personas, cuando su actividad ordinaria oscila entre grupos que van de los 30 a los 100 migrantes.
Debido a la constante llegada de migrantes que arriban a la entidad y que pasan por la ciudad, muchas de las personas en situación de movilidad, se han visto obligados a permanecer en la ciudad y es cuando optan por llegar a los albergues tanto en la capital, como en la frontera de Ciudad Juárez, para tener un lugar donde dormir y alimentarse según explicó, la coordinadora del albergue Linda Flores.
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Este pasado fin de semana del 23 al 24 de septiembre, se registró una saturación de migrantes, que buscaban un espacio donde dormir, debido a que habían sido desalojados por personal del Instituto de Migración, por lo que estas familias terminan deambulando por las calles hasta llegar a este espacio donde les ofrecieron una cama y atención para poder pasar la noche.
La mayoría partió del albergue el lunes 25 de septiembre, en busca de un medio de transporte que los acercara a ciudad Juárez, para poder seguir su camino a la frontera y cruzar a Estados Unidos, donde buscarán la forma de asentarse mientras las circunstancias en sus países de origen mejoren.
Según una de las voluntarias del Albergue San Agustín, han estado recibiendo gente desde hace cerca de cinco semanas, grupos de más 100 migrantes por día, donde se encuentran familias que buscan una ducha, comida, un cambio de ropa limpia, medicamentos y tratar sus heridas para luego seguir con su camino.
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También contó Linda, que en muchas ocasiones las familias se quedan más tiempo por cuestión de salud, donde terminan hospitalizados debido a la deshidratación y mala alimentación en la que se ven obligados a pasar por el viaje que realizan.
El miércoles pasado tuvieron alrededor de 500 migrantes fluctuando durante el día, mismos que salieron ese mismo día buscando los ferrocarriles que los llevarían a la frontera, sin embargo, muchos de ellos volvieron el jueves por que no salió el tren en el que se buscaban trasladar hacia la frontera.
Asimismo, tras el desalojo del día sábado 23 más comenzaron a arribar estas personas en situación de movilidad en grupos de 20 al albergue, donde fueron atendidos con una ducha y comida; luego de las 4:00 de la tarde el albergue se encontraba al máximo de su capacidad, por lo que solo permitían la entrada a las duchas.
Debido a ello, algunos voluntarios ayudaron a aquellos que se habían quedado lejos del albergue sobre la Lombardo Toledano, Juan Pablo II y calles aledañas, llevando kits con productos de higiene, medicamentos y alimentos.
