Los trabajos de demolición continúan en el edificio de departamentos que explotó hace seis meses debido a una importante fuga de gas, esto, luego de que las autoridades de Protección Civil determinaron como obligatoria la medida de la demolición, por significar la estructura ruinosa un riesgo para la seguridad de transeúntes y vecinos de la calle, particularmente a quienes colindan con la construcción.
Fue el pasado 10 de marzo cuando, una fuga de gas LP ocasionó el accidente, pues al acumularse en uno de los apartamentos se generó la explosión y comprometió la estructura de todo el edificio, e incluso de edificaciones aledañas.
Durante los últimos seis meses el lugar ha permanecido acordonado y con permanente vigilancia de una patrulla de la Policía Municipal, quienes hacían guardia para cuidar que nadie ingresara al inmueble, puesto que aún se encontraban enseres domésticos como muebles, estufas, boilers y otros artículos que podían llamar la atención de los amantes de lo ajeno.
La calle 30a se encuentra cerrada a la circulación vehicular y vecinos del lugar manifestaron que el dueño del edificio no había demolido por falta de recursos económicos, pues la pérdida derivada de la explosión fue muy grande.
El día del accidente, elementos de la Policía Municipal y de bomberos acudieron al llamado de auxilio de vecinos que fueron sorprendidos por el fuerte estruendo y encontraron que dos hombres y una mujer resultaron heridos de consideración a causa del siniestro.
Se reportó que la fuga de gas se derivó de una línea en mal estado que estaba conectada a un tanque de gas LP de 45 kilos, por lo que fue una explosión considerable que además, dañó dos edificios y cuatro casas aledañas, quebrando vidrios de ventanas y cuarteó la pared de la casa de un costado.
Los trabajos de demolición se realizan por una empresa privada de denominación “Willy Estrada”, empresa que colocó una lona en el exterior del edificio y donde trabajan con maquinaria pesada para retirar los escombros del edificio.
Se pueden observar las paredes derribadas y que poco a poco se van retirando sus escombros, quedando en pie únicamente los castillos de concreto que sostuvieron la estructura cuando estaba en buenas condiciones.