Benjamín Caraveo Yunes, presidente de la comunidad México-Libanesa de Abogados, informó que se lograron avances para la creación del Centro Libanés en Chihuahua, al gestionar con autoridades del Gobierno del Estado de Chihuahua, el espacio para el inmueble.
“Reforzamos hoy en Palacio de Gobierno, con el secretario César Jáuregui, la donación de un terreno para poder tener un Centro Libanés digno aquí en Chihuahua, donde podamos congregarnos y reunirnos. No hay una ubicación definida, apenas se van a comenzar los trabajos. Año con año se habían visto las ubicaciones, aunque no se había definido. Ahora se vuelve a trabajar para definir una ubicación digna, completa, que pueda ser un proyecto a corto, mediano y largo plazo, como un Centro Libanés de la Ciudad de México”, afirmó.
Lo anterior dentro de la visita del Consejo Directivo del Centro Libanés de la Ciudad de México, encabezada por su presidente, Michell Kuri Hanud, a quien acompaña una comitiva de 30 integrantes, y posteriormente, se integrará otra parte, con el embajador Sami NMeir y como testigo de honor, el ex ministro en retiro, José Ramón Cossío Díaz.
El Centro Libanés tendrá la finalidad de ser un centro deportivo, cultural, social, donde también se abone para sacar a los jóvenes a hacer deporte, y encauzarlos a actividades positivas. Tiene una finalidad de impactar positivamente a la comunidad chihuahuense.
“Invitamos a todos los ‘hayes’ (hermanos), paisanos libaneses en el estado de Chihuahua, para que se acerquen, se congreguen y sepan que iniciamos un proyecto comunitario, cuya finalidad es unir, que nos podamos unir en un proyecto de inmueble, y entre tanto, que nos podamos abrazar, todos los que tenemos en común esta bonita nacionalidad en común”, exhortó.
Año con año desde hace dos décadas, recibimos la comunidad libanesa en Chihuahua a representantes del Centro Libanés en la Ciudad de México. Hoy nos visita el presidente del Centro Libanés, Michel Kuri, también el embajador de Líbano en México. Se hace acompañar esta gran comitiva con ex presidentes y miembros honorables del Centro Libanés.
“Para nosotros como comunidad del estado de Chihuahua, recibir a estas personalidades, es muy importante porque es un encuentro cultural con nuestras raíces y también porque refleja un apoyo y reconocimiento del centro del país, donde radica la mayoría de la comunidad libanesa en primera y segunda generación”, compartió Benjamín Caraveo Yunes.
Desde hace dos décadas, se ha formado la tradición de que en el mes de noviembre acude la comitiva de la comunidad libanesa a Chihuahua, en la que se agenda todo un fin de semana con actividades, cenas, convivencias, y se procura llevarlos a diferentes regiones del estado. Este año las actividades, se tiene programada una comida en la ciudad de Cuauhtémoc, Chihuahua, donde será anfitriona la familia Athié, entre otras programaciones, que concluirán el próximo lunes 15 de noviembre.
Caraveo Yunes refirió que en el último censo de la comunidad libanesa en Chihuahua, se contempla 45 familias, ubicadas por apellido.
Comida Libanesa
Por su parte, el chef José Luis Trejo Néder, mencionó que es una tradición cocinar comida libanesa, que ha impulsado desde su la familia con el restaurante Los Fenicios, con casi cuatro décadas de tradición en la ciudad de Chihuahua.
“Soy la segunda generación, empecé a los 13 años, trabajando con la familia y ahora ya lo continúe yo. Tengo cuatro años manejando el restaurante, y en la Ciudad de México tengo otro, el Salón Libanés. Para mí es recordar y vivir con familia y amigos, mi raíz, mi familia. Aprendí todo con ellos, y así fui creciendo. La preparación es diferente, la comida mexicana y la libanesa tienen insumos o ingredientes muy frescos y variados, es muy sana. La diferencia es que la cocina mexicana es un poco más picante, y la comida de medio oriente es más condimentada, pero al final, van de la mano. Por eso hay tantos libaneses en México, porque se sienten muy a gusto en el tema de la comida, y como en el de la hospitalidad: Todos somos hermanos, todos nos queremos, y todos vamos para adelante”, expresó.
La comida estuvo compuesta por siete platillos, entre los que se incluyeron jocoque, humus, tabule, hojas de parra, hojas de repollo, kibbe de bola, kibbe crudo, pan árabe, aceitunas negras. De postre ombligo de pistacho, entre las viandas de las que el chef subrayó que son de las más tradicionales y populares entre la cocina libanesa.