La ciudad de Chihuahua contará con dos acueductos para dotar de agua potable a la población, ello como parte de las acciones para garantizar el suministro para el consumo humano y producción de alimentos para futuras generaciones.
El ingeniero Mario Mata Carrasco, director ejecutivo de la Junta Central de Agua y Saneamiento explicó que se trata de una política que se basa en la sustitución del agua subterránea por agua superficial, el objetivo es dejar a los acuíferos en equilibrio.
Aunque con esta acción los acuíferos no llegarán a un equilibrio al 100 por ciento, pero se permitirá que futuras generaciones cuenten con el agua necesaria para producir alimentos y agua potable. En coordinación con el sector agropecuario están trabajando para dejar de usar los acuíferos y que descansen.
A la fecha se trabaja en varios municipios, entre ellos Camargo y Coronado, en el primer municipio iniciaron los trabajos para la construcción de una galería filtrante. En Coronado ya se puso en marcha la galería filtrante, a la cual también se le denomina túnel subterráneo o minas de captación de agua, que se trata de un método ancestral para el aprovechamiento del agua.
Mario Mata resaltó que estas galerías filtrantes representan un paso significativo hacia la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente, al incorporar tecnologías eco-amigables en el proceso.
En la galería de Coronado se cuenta con un sistema de bombeo alimentado por energía solar que incluye un motor de 7.5 caballos de fuerza y un arreglo fotovoltaico de 15 mil 400 watts.
El Municipio de Coronado efectuó la obra civil y la interconexión necesaria para la perforación del pozo colector; la JCAS contribuyó con personal y recursos para el equipamiento de la galería.
El titular de la JCAS mencionó que estas galerías se estarán construyendo en los lugares que se pueda y donde no haya una fuente de abastecimiento de aguas superficiales, como en Chihuahua se necesitarán acueductos.
En la capital ya se tienen los proyectos de dos acueductos, el primero iniciará en la mina de San Antonio y el otro de alguno de los ríos que puede ser el Río Papigochi u otro que parta de la Sierra, del agua que se entrega a Sonora y Sinaloa.
El ingeniero Mata explicó que están buscando con la Comisión Nacional del Agua que se permita parte de esa agua para el consumo humano, ya que de acuerdo a la Ley de Aguas Nacionales del 92 establece que tiene prioridad el agua para consumo humano.
Que se nos entregue una pequeña parte, con un 5 por ciento de lo que Chihuahua entrega a Sonora y Sinaloa es suficiente para dar abasto a los municipios de Guerrero, Cuauhtémoc y Chihuahua.
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De la misma manera se tendrá que hacer en Ciudad Juárez, entre las alternativas está la Mina Bismark o bien realizar una buena negociación con el Distrito de Riego 009 para que brinden un poco de agua que Estados Unidos entrega en el río Bravo que se establece en la convención de 1906.
El agua que el ejido entrega se estaría intercambiando con agua residual de buena calidad a fin de que no se vea afectada la producción. El agua potable serviría para abastecer a la población de Ciudad Juárez.
“Todo es factible y además necesario para no agotar los acuíferos”, señaló.
El acueducto de la mina San Antonio lleva un buen avance y se espera que al finalizar el año ya esté en fase de construcción.