Durante su desempeño de salvar vidas y combatir fuego en la corporación de donde está próximo a jubilarse, alcanzó metas académicas, deportivas y profesionales.
El bombero oficial Sergio Caldera Chacón es reconocido por la corporación a la que ha pertenecido durante más de 30 años, con sacrificio pudo combinar el trabajo con el estudio y en 2007 se recibió como licenciado en Periodismo; además de participar en carreras deportivas, entre otros logros que han enriquecida su vida personal.
El oficial Caldera Chacón empezó con muchos sueños e ilusiones, pero sobre todo con una vocación inquebrantable que lo ha llevado a mantenerse activo a lo largo de casi 30 años en el Heroico Cuerpo de Bomberos del Municipio de Chihuahua donde pasó por diversos puestos y comisiones hasta convertirse en oficial, uno de los más altos rangos.
La vocación de bombero ha combinado su carrera con el deporte y el estudio, lo que le ha permitido convertirse en licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Chihuahua; correr el Maratón de la Ciudad de México, participar en cuatro Juegos Latinoamericanos para Policías y Bomberos, así como primeros y segundos lugares en carreras de la capital del estado como de la zona serrana.
Sergio Caldera Chacón, oficial en el Heroico Cuerpo de Bomberos, nacido en esta ciudad de Chihuahua hace 50 años y quien en abril de 2023 estará cerrando un ciclo, cumpliendo un paso más en esta carrera que es la vida.
Ingresó como bombero de Academia alrededor de los 20 años de edad y en su larga carrera ha servido como rescatista, paramédico, comunicador social, titular de la Unidad Municipal de Protección Civil, lo cual le ha permitido pasar por los puestos de jefe de turno, jefe de batallón, maquinista y encargado de estación. Su puesto más reciente ha sido como instructor de Academia y catedrático de Licenciatura en el Instituto Superior de Seguridad Chihuahua.
Además, su inquietud constante lo llevó a servir como paramédico en la institución que ha sido como su segunda casa, la Cruz Roja Mexicana, por espacio de 10 años, a donde espera regresar nuevamente.
“No sólo el fuego es una de mis pasiones; el espíritu de servicio también me apasiona y me gusta tanto como el deporte, salir de pesca, estar en el campo, leer, escribir y practicar carpintería”, compartió.
Sin embargo, como suele suceder en este tipo de trabajos, hay tragedias que lo han marcado como bombero y refiere con cierta tristeza y nostalgia haber visto caer en el servicio a bomberos y policías, como en el incendio de la calle Libertad y también gente extraña en algunos accidentes donde han perdido la vida adultos y niños.
“Son hechos que te impactan a pesar de la experiencia y es parte de lo que ha marcado mi vida”, expresó el oficial Caldera.
En su vida familiar, es padre de tres mujeres de 18, 20 y 24 años de edad, dice sentirse orgulloso como servidor público y no haber tenido problemas en ninguno de los cargos que ha desempeñado, gracias a la lealtad, sinceridad, y honestidad con que se ha conducido, pues sostiene que el servidor público debe ser honesto, sincero y leal con sus comisiones.
Al cabo de estas tres décadas de servicio agradeció a Dios por cerrar su ciclo sin problemas, a la Dirección de Seguridad Pública Municipal, al Instituto Superior de Seguridad Pública Municipal, ISSCUU; y al Centro de Desarrollo Integral Policial, Cedipol, por el apoyo que le han brindado y concluye con seguridad en sí mismo que aún podría dar más; pero reconoció que hay que cerrar ciclos para iniciar nuevos proyectos.
