Integrantes de 11 comunidades indígenas de Urique y Bocoyna presentaron el plan de desarrollo regional Nátiga Busuré- soñar juntos- con el cual buscan remediar las principales problemáticas que enfrentan en la Sierra Tarahumara, como son tala, basura, aguas residuales que contaminan, inseguridad, salud, educación e infraestructura.
“Estamos en el olvido y abandonados”, señalaron Javier Mauricio Núñez Rentería de la comunidad de Pitorreal, Víctor González Núñez y Teresa González de Bosques de San Elías Repechique, Celia Moreno de Bacajiparé y Jesús Vega Quezada de Cuiteco, quienes agregaron que sólo cuando andan en campaña visitan a los indígenas, quienes ni siquiera conocen a sus representantes en el Congreso del Estado y las autoridades de gobierno no les atienden.
Desde el 2012 la SCJN emitió una sentencia que ampara a los indígenas con la construcción del aeropuerto regional en Creel y que obliga al gobierno a realizar un plan de desarrollo con participación y consulta indígena, sin embargo a la fecha no se ha realizado.
Las principales demandas son la construcción de un hospital regional en el Divisadero, así como de equipamiento de casas de salud; programa multianual de inversión en conservación de suelos y agua, construcción de represas de captación de agua de lluvia; una planta recicladora de basura; profesores bilingües, escuela de artes y oficios, mejoramiento y aumento de infraestructura escolar; sistema de transporte ralámuli; tienda regional de artesanías que incluya compras de insumos, escuela regional de turismo y conectividad.
Teresa González explicó que entre las problemáticas que tienen que sortear en materia educativa es la falta de docentes bilingües por lo cual los niños y niñas no saben ni escribir, tampoco hacer cuentas. No cuentan con la infraestructura adecuada, su propuesta es que se designen maestros bilingües para educación básica, así como la instalación de una escuela secundaria y un albergue equipado. “Hay que mejorar el bienestar de niñas y niños, para que coman 3 veces al día, que no tengan que caminar tanto para llegar a la escuela”.
De la misma manera urgió por acciones de prevención en consumo de alcohol y drogas, así como accidentes. Además de la cobertura de internet debido a que con la pandemia por la Covid-19 muchos estudiantes tuvieron que abandonar sus estudios.
En su intervención, Javier Mauricio Núñez Rentería destacó que en materia de medio ambiente les ha afectado la tala ilegal, la erosión, incendios y la contaminación del agua. Una problemática recurrente es el exceso de basura que generan los turistas, “El proyecto turístico no tiene un plan de manejo de basura y las descargas de aguas residuales. Nuestra propuesta es una planta recicladora de basura 6 regular el sector turístico para el manejo de agua y suelos. Queremos que se nos escuche y tome en cuenta. Nos tienen en el olvido, no nos escuchan ni nos orientan”.
En materia de salud, Víctor González Núñez, señaló qué hay comunidades que tienen su casa de salud pero no están equipadas, tampoco cuentan con medicamento. A ello se le suma que no existen promotores de Salud bilingües que puedan explicarles a los enfermos sus padecimientos, así como la mala calidad de los caminos, que impiden el acceso de vehículos para el traslado de enfermos.
Denunciaron que en varias comunidades existen clínicas y casas de salud pero no se usan.
En el tema de seguridad, Lorenzo Moreno del municipio de Urique mencionó que no cuentan con comisarios de policía, en las comunidades solo está el gobernador indígena y sus capitanes que son como policías voluntarios, ellos se reúnen en la iglesia y llevan a ajusticiar a los delincuentes, pero hace falta la presencia policial, pues los robos se han incrementado.
Destacaron que todas esas problemáticas les afectan, “Ya no quiere llover y el maíz se seca”, señaló Miguel Escobar Torre, quien denunció que los gasoductos están afectando las venas de la tierra para la producción de agua.
Pidieron al gobierno que les diga cómo se puede hacer para atender las necesidades y se designe el presupuesto necesario para el cuidado del bosque y la economía de las familias.
En su propuesta de solución plantean la implementación de 4 mesas de trabajo: medio ambiente; desarrollo comunitario (salud, educación y vivienda); seguridad, y economía (turismo, artesanías, transporte, empleo y proyectos), donde desde luego se tomen en cuenta sus propuestas y el pensamiento de los indígenas.
Una comitiva de representantes de estas comunidades acompañados de la Consultoría Técnica Comunitaria (Contec) se reunió con la diputada Rocío Sarmiento, presidenta de la Comisión de Asuntos Indígenas a quien le presentaron las propuesta a fin de que se tome en cuenta en los presupuestos de egresos para los próximos 5 años.
Además se reunirán con César Jáuregui, secretario general de gobierno; con Felipe Edibray Gómez, secretario de Turismo; y con el titular de Coepi.
Durante el miércoles se reunirán con Juan Carlos Loera de la Rosa, delegado de los Programas para el Bienestar en Chihuahua.