La diputada de Morena, María Antonieta Pérez, dio a conocer que PROFEPA clausuró algunas áreas de la planta de Grupo Cementos de Chihuahua (GCC) como respuesta a las denuncias que ella ha encausado en contra de la empresa por el peligro que implica utilizar el material denominado Clinker en esa fábrica.
Tras varios meses de haber respaldado la denuncia por parte de vecinos de al menos quince colonias aledañas a la empresa, finalmente las autoridades han tomado medidas contundentes al respecto clausurando áreas de trabajo especificas a fin de mejorar el manejo que realizan respecto a la elaboración de los productos que ofrecen.
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Pérez Reyes recordó que esta denuncia la ha presentado en varias ocasiones ante la tribuna del poder legislativo, así como en diferentes instancias como la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), PROFEPA y SEMARNAT, estas ultimas relacionadas con el cuidado del medio ambiente.
Fueron esas mismas las que iniciaron con las indagatorias sobre la polución emitida por la empresa cementera y, tras casi tres meses de dichas investigaciones, esa respuesta a las denuncias se traduce en clausuras oficiales por las autoridades federales toda vez que operan con contaminantes y sin licencia federal.
La legisladora explicó que entre las clausuras que hicieron se enlistan ocho equipos de producción, mientras que tres de los hornos clausurados fueron al 100 por ciento, mientras que uno lo dejaron funcionando al 90 por ciento hasta que no hagan nuevas emisiones con el método que PROFEPA autoriza y se tiene contemplado para México.
Igualmente, los patios fueron clausurados en un 50 por ciento “porque encontraron en los patios donde se tritura y se muele la piedra, hay bandas transportadoras y hay mucha fuga de emisiones fugitivas, así le llaman ellos”, señaló la morenista quien acusó que todo eso es lo que ha estado provocando la contaminación en la ciudad.
Agregó que GCC no tiene ningún procedimiento preventivo para evitar que esas emisiones fugitivas salgan al aire lo que demuestra el daño que dicha empresa le ha causado por años a los vecinos, quienes se atrevieron a denunciar.
Dentro de la auditoria efectuada por la PROFEPA a GCC, el auditor Gonzalo Coello le informó a la congresista que dicha empresa cementera mide su emisión de partículas contaminantes al aire con un método que no se autoriza en el país, por lo que se deberá regular igualmente.
Otra de las cuestiones que se deben adecuar es contemplar los “cañones de humedad” que crean una cúpula que impide que dichas partículas salgan al ambiente.
Ante esta situación, la diputada espera que la empresa esté abierta a colaborar reparando las irregularidades que fueron detectadas y que son por el bien de la comunidad, de sus propios empleados y de su operación comercial.
