Algunos locatarios de calles del primer cuadro de la ciudad, denunciaron que por la tarde, conforme empiezan a salir de sus labores trabajadores del Gobierno del Estado y oficinistas, hay calles por las que no se puede circular a pie o que sus vehículos están en riesgo de robo, por la presencia de ladrones.
Ejemplo de ello fue el robo reportado en las calles Allende y 19, en pleno centro de la ciudad, sujetos desconocidos se introdujeron a un edificio en el cual hay un despacho de abogados y un negocio de venta de equipos de fotografía, de donde sustrajeron material diverso.
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De acuerdo a lo narrado por los afectados, durante la madrugada, el ladrón o los ladrones, ingresaron por un boquete que hicieron entre un muro y el techo de lámina del edificio, por lo que sustrajeron una laptop y otras pertenencias del despacho de abogados.
Ahí mismo, en el despacho de abogados, también venden equipo fotográfico, de donde se llevaron algunas cámaras, accesorios y otros objetos de valor, denunciaron los afectados a las autoridades.
Por el momento no han podido establecer el monto total del robo, debido a que están revisando que es lo que falta para presentar la formal denuncia ante la fiscalía de distrito zona centro.
Aprovechando la situación, robaron también un despachador de agua purificada que está en un costado del negocio de cámaras fotográficas y despacho de abogados, para lo cual también generaron daños.
En lo que respecta al robo del purificador de agua, destrozaron la caja donde los clientes depositan monedas a cambio del servicio, de lo cual también tomó nota la autoridad correspondiente.
Los afectados denunciaron que, no es la primera vez que los “amantes de lo ajeno” roban en estos negocios, sobre todo en el despachador de agua purificada, de donde van varias veces que extraen las monedas.
Cabe destacar que, algunos de los negocios de esta zona del centro de la ciudad, denunciaron que ya están cansados de que los roben de manera constante, tanto en sus negocios como en los automotores estacionados.
Uno de estos es un consultorio médico que está sobre la calle 19, en donde los afectados, por temor a represalias pidieron omitir sus datos, comentando que después de las seis de la tarde, es imposible poder caminar en esa zona, incluso tampoco pueden dejar los carros afuera estacionados, por los famosos "cristalazos".