El profesor Alonso Méndez Torres, director de Chihuahua Tiempo Severo, realizó una compilación de fotografías y una investigación sobre la tromba de septiembre de 1990, en conmemoración de 31 aniversario este miércoles 22 de septiembre, que fue bautizado como el ‘Sábado Negro’, por las afectaciones y pérdidas que causó en la ciudad de Chihuahua.
“El 22 de septiembre de 1990 marcó un hito en la historia de la Capital del estado; aquel sábado por la tarde se observaba como cualquier día normal cuando comenzaba a llegar densa nubosidad del noroeste y oeste de la ciudad de Chihuahua. Comenzó como una lluvia ligera que gradualmente en pocos minutos se convirtió en lluvia intensa, dejando caer 140 mm de lluvia en tan sólo dos horas. Aquello era el caso para una ciudad que hasta la fecha, continúa con estos problemas de inundaciones”, relató Méndez Torres.
Como saldo de ese ‘Sábado Negro’, se reportó la pérdida de la vida de 47 personas y más de 300 desaparecidas.
Dentro de la investigación científica que realizó el profesor Alonso Méndez, menciona que en las condiciones meteorológicas de ese 22 de septiembre, se conjuntaron algunos factores, como el fenómeno de El Niño, en su fase neutra, aún activa en septiembre; así mismo, ingresó por el norte del estado el primer frente frío de la temporada.
Aunado a lo anterior, se registraron altos índices de inestabilidad en la atmósfera superior provocada por el choque de masas de aire cálido, con una fuerte entrada de humedad de ambos océanos, un canal de baja presión, divergencia en altura, lo que provocó que se observaran tres nubes embudos, que se mantuvieron en alto, pues de haber bajado y tocado tierra, se hubieran convertido en tornados, generando aún más daños.