Esta mañana personal de seguridad todos los niveles de gobierno, se reunieron en Palacio de Gobierno, para llevar a cabo un análisis y estrategia de seguridad ante el asesinato y desaparición de los cuerpos de dos sacerdotes en la comunidad de Cerocahui ubicada en el municipio de Urique.
Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional, Fiscalía General de la República, Fiscalía General del Estado, Secretaría de Seguridad Pública del Estado, fueron los que se encuentran reunidos este día en las instalaciones de Palacio de Gobierno, donde esperan emitir una postura oficial sobre los hechos ocurridos el pasado 20 de junio en la Sierra Tarahumara.
Por la noche del lunes, la Fiscalía General del Estado, emitido un breve comunicado, en el que informaba que se encontraba investigando el homicidio de tres personas en Urique, entre ellos dos sacerdotes quienes se encontraban al interior de un centro religioso, donde acudieron los pistoleros y los mataron.
Además de esa información, las autoridades no han emitido mayor información al respecto y actualmente se mantienen en una reunión para buscar una coordinación entre todos los mandos de seguridad.
Violencia en la Sierra Tarahumara alcanza a sacerdotes
Como se informó, ayer lunes se dio a conocer del ataque a balazos contra los sacerdotes jesuitas Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar, cuando un civil ingresó al templo en la comunidad de Cerocahui, del municipio de Urique, ya que lo perseguían unos sujetos.
De acuerdo con un testigo, quien dio aviso a las autoridades municipales de lo ocurrido, los agresores dispararon contra un hombre así como los párrocos y se habrían llevado los cuerpos.
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La Compañía de Jesús, la Arquidiócesis de Chihuahua y el Centro del Episcopado Mexicano condenaron los hechos, exigieron una exhaustiva investigación y la devolución de los cuerpos de los jesuitas.
Al respecto, la gobernadora María Eugenia Campos lamentó los hechos violentos en los cuales, los clérigos fueron asesinados, cuando presuntamente un civil objetivo de un ataque armado, se refugió en la iglesia de Cerocahui.
En su cuenta de Twitter, publicó; “Personalmente atendí los protocolos de seguridad y coordinación entre las corporaciones de seguridad para garantizar la protección de los religiosos que se encuentran en la zona. Me comuniqué con los sacerdotes y autoridades para dar seguimiento puntual de las acciones a seguir”.
