Carlos Romero, titular del departamento de Catastro del municipio de Delicias, alertó por estafas en la adquisición de propiedades, ya que detectaron recientemente a personas que intentan efectuar trámites con documentos falsos proporcionadas por una supuesta asociación civil.
El funcionario comentó que han detectado a algunas familias que se acercan a realizar movimientos, como el cambio de nombre de propiedades, para lo cual han presentado documentos que les dieron por medio de una asociación, como también algunos contratos de compra- venta poco fiables.
Romero invitó a los delicienses que planeen realizar una compra venta o firmar algún documento de esta operación, a revisar la propiedad que pretenden comprar y verificar que la misma esté a nombre de la persona que la ofrezca en venta.
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“Para eso está Catastro Municipal, está Desarrollo Urbano y Ecología de Gobierno del Estado, está Registro Público; la verdad, es un tema muy sentido que lo vemos muy seguido aquí en Catastro, que vemos situaciones con ciertas características que les prometen el negocio de su vida, que les hacen ver las cosas muy fáciles… los invitamos a que se acerquen a revisar el antecedente”, reiteró.
Exhortó a los ciudadanos a no dejarse despojar de su patrimonio, invitando nuevamente a que acudan a Catastro para revisar si la propiedad que intentan adquirir está a nombre del vendedor.
“Algo que le interesa al presidente municipal Jesús Valenciano es estar trabajando con la certeza jurídica de varias colonias, en el casco viejo, de estar ayudando a la gente a resolver esos problemas que tienen de antaño; entonces, para evitarnos esos problemas que después vengan con una denuncia de fraude, vamos a checar de raíz antes de que se origine ese trámite”, aconsejó.
El jefe de Catastro denunció que ciertas asociaciones piden a las personas una cuota o dinero para pagar el agua y el impuesto predial, por lo que otra vez llamó a ser cautos, pues el recurso monetario nunca será para ese fin.
Mencionó que a las familias se les pide una cantidad de efectivo para ser parte de la asociación; después se les pide una cuota de 25 mil pesos y luego los posesionan en las casas que pretenden venderles, las cuales son inmuebles vandalizados o en desuso.
Posteriormente, la misma asociación exige una cuota de 200 o 300 pesos quincenales a los posesionarios de las viviendas.
“Así no trabajan el Infonavit, ni Coesvi ni Gobierno del Estado; eso para nosotros es un foquito rojo, invitar a los ciudadanos a que no caigan en esa estafa”, reiteró.