Estudiantes, maestras y mujeres en lucha integrantes del Colectivo Universitarias en Resistencia denunciaron el plagio de su pliego petitorio, mismo que la institución se apropió y presentó como el plan de acción para combatir la violencia de género. Exigieron una disculpa pública.
Frente a la Rectoría de la Universidad Autónoma de Chihuahua exigieron una educación libre de violencia, pues debido a su trabajo en defensa de los derechos de las mujeres han sido víctimas de amenazas con retención de títulos, retiro de becas y hasta negarles oportunidades.
Una de las representantes resaltó que las autoridades educativas no han empatizado con los colectivos feministas, pues no tienen el menor interés de atender la problemática de violencia que existe al interior de la universidad, donde a diario son violentadas y amenazadas.
Exigieron una disculpa pública ante medios de comunicación por el plagio de su trabajo, “Nos merecemos ser reconocidas por el trabajo del pliego petitorio que se apropió la UACH”.
Reiteró que a las autoridades universitarias les molesta verlas encapuchadas pero si toman su trabajo y lo publican como propio.
Cabe recordar que desde el pasado 1 de septiembre de 2021 se inició con mesas de trabajo para atender la problemática, sin embargo ese día volvieron a ser invisibles, pues incluso la anterior abogada agredió a una de las compañeras.
Exigieron a la UACH romper el pacto patriarcal, pues a pesar de qué hay decenas de carpetas y quejas de acoso y violación, la UACH continúa protegiendo a los docentes victimarios.
“Los docentes violadores siguen ejerciendo, solo los pasan a puesteros administrativos para que sigan cobrando sus cheques”, dijo la representante, quien reiteró que las amenazas en su contra continúan.
Exigieron acciones y no solo palabras.
La defensora adjunta Ana Luis Anchondo de la Defensoría de los Derechos Universitarios salió para ofrecerles y un diálogo, sin embargo las universitarias exigieron primero la disculpa y después se sentarán de nuevo a la mesa para continuar con verdaderas acciones afirmativas en beneficio de las mujeres universitarias.
Consideraron que la Defensoría de los Derechos Universitarios es solo un “adorno”, una simulación más de la UACH, por lo que exigieron acciones y no solo palabras.
Las universitarias pegaron en el edificio varías hojas con fotografías de agresores e incluso del actual abogado general Mario Trevizo Salazar con la leyenda “Vergüenza de ser UACH”.