Desde el año 2004 a la fecha el estado de Chihuahua ha pagado por la seguridad privada de dos exgobernadores, quienes tras haber concluido sus administraciones continuaron con seguridad como escoltas para resguardar su integridad, lo cual podría ser suspendido de aprobarse la reforma emitida por el Ejecutivo.
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Se trata de los exgobernadores Patricio Martínez García y José Reyes Baeza Terrazas, quienes pertenecen al Partido Revolucionario Institucional y que en el año 2004 y 2010 concluyeron sus respectivas gestiones como gobernadores y hasta el momento continúan con protección erogada del Estado.
En la reforma de la seguridad y protección de personas funcionarias públicas al concluir su encargo o nombramiento se pretende que los funcionarios estatales puedan adquirir protección por el mismo periodo que ejercieron el cargo; algunos cargos de seguridad y el secretario general son los que pueden adquirir esta protección.
Con este ajuste se terminaría el pago de la seguridad que ha mantenido desde hace 17 años Patricio Martínez y la de José Reyes Baeza, de hace alrededor de once años, cuando culminaron sus respectivas administraciones.
El cuerpo de seguridad del gobernador Javier Corral Jurado ha tenido por lo menos dos ataques armados en el estado de Chihuahua, incluso uno de ellos al exterior de su domicilio actual en la capital del estado, ya que pistoleros de Juárez viajaron con ese propósito.
Los hechos ocurrieron en febrero de 2020, cuando resultaron varios agentes lesionados y se logró la captura de por lo menos tres implicados; horas más tarde fueron ubicados por los elementos de seguridad.
De acuerdo a la información que recabó el equipo del gobernador Javier Corral, este grupo de pistoleros había sido enviado a “calentar” la plaza, por las intervenciones que mantenían en el Cereso 3 en Juárez y las constantes detenciones de integrantes de una organización criminal que opera en la frontera.
En abril de 2018 los escoltas del fiscal general del estado, César Augusto Peniche, fueron atacados, lo que dejó saldo de un oficial muerto y por lo menos cuatro personas lesionadas en el intercambio de balas al exterior del fraccionamiento donde habita el funcionario, ubicado en La Cantera.
El secretario de Seguridad, Emilio García Ruiz, no ha tenido ataques directos o a su personal de seguridad en el estado de Chihuahua, sin embargo hace un par de años en Guerrero sufrió una emboscada, donde recibió al menos ocho impactos de arma de fuego producto de su ejercicio como agente de seguridad.
Por su parte, el exgobernador Patricio Martínez en 2001 fue objeto de un atentado con arma de fuego perpetrado por una ex agente de la Policía Judicial del Estado identificada como Cruz Victoria Loya Montejano, despedida de la corporación hacía un par de años; se mantuvo hospitalizado, ya que recibió el impacto en la cabeza.
En el caso del ex obernador José Reyes Baeza, en el año 2009 fue víctima de un atentado armado, donde uno de sus escoltas perdió la vida; él logró sobrevivir a este intento de asesinato.