Los dos implicados en el homicidio del ex funcionario de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento, Luis René Villarreal Pérez, fueron presentados ante un juez en donde se les informó que enfrentan cargos por el delito de homicidio, asimismo, durante la audiencia de imputación, el agente del Ministerio Público, detalló cómo es que ocurrieron los hechos que acabó con la vida del ex funcionario, y en donde también salieron a relucir los nombres de dos empresarios, quienes presuntamente están relacionados con ese hecho violento.
Según las pruebas y la información recabada, tanto en la escena del crimen, en cateos domiciliarios y proporcionada por un testigo protegido identificado como “Bruno”, los hechos ocurrieron luego de que Luis René Villarreal Pérez, tuviera una deuda de 1.5 millones de pesos con el empresario Alejandro R. y los empresarios de nombre Oscar y Sebastián T. quienes ordenaron a los hoy detenidos, Ramón M. y Gerardo C. que mantuvieran vigilada a la víctima, a quien, según el relato, ya habían amenazado anteriormente.
Lo narrado por el MP durante la audiencia, señala que Gerardo Hilario C, en una ocasión había llevado a Villarreal Pérez a una ladrillera, en donde “le dio un susto” para forzarlo a pagar la deuda con los empresarios, posteriormente, el ahora occiso, estuvo dando abonos de 10 mil pesos, sin embargo, los acusados, tomaban el dinero a cuenta tan sólo como pago de intereses y no como abono a la deuda.
Fue el pasado 18 de enero, cuando Ramón y Gerardo, trasladaron a René a un terreno ubicado en la carretera a Delicias, en donde fue agredido, le propinaron siete disparos de arma de fuego calibre .45, le lanzaron dos piedras a la cabeza, y posteriormente lo degollaron con una navaja.
El testigo protegido, señaló que, tras el asesinato, Ramón, le comentó que traía la adrenalina al millón y que ya lo había matado.
La versión señala también que una vez perpetrado el homicidio, los acusados recogieron de la escena del crimen los siete cartuchos percutidos para evitar dejar evidencia, y se fueron a comer pizza.
Asimismo, de acuerdo al Ministerio Público, el acusado de nombre Ramón, anteriormente se había desempeñado como agente de la policía (sin especificar la corporación), y luego se convirtió en escolta de empresarios, siendo Oscar y Sebastián T. a quienes recientemente les prestaba su servicio como escolta.
Tras escuchar la narrativa de los hechos y ver las evidencias presentadas por el MP, el juez encargado del caso, dictó un año de prisión preventiva como medida cautelar, y citó para la siguiente audiencia de vinculación, la cual será celebrada el próximo 16 de marzo.
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