Uno de los objetivos prioritarios, por ser un principal generador de violencia en el estado de Chihuahua, es René Gerardo S.G. el 300, quien en el año 2018 fue capturado por agentes federales durante la administración de Javier Corral Jurado, quien logró enviarlo a prisiones de máxima seguridad fuera del estado.
Luego de que su defensa llevara a cabo diferentes estrategias legales, en tres años, en el mes de octubre de 2021, quedó en libertad y regresó a Chihuahua, donde según las autoridades estatales tomó sus operaciones de nueva cuenta.
En 2018 fue capturado René Gerardo, según informó el Gobierno de la República, que reveló en un mensaje a la nación que era el líder de la organización delictiva denominada Los Aztecas, y sus actividades delictivas consistían en extorsiones, venta de droga y homicidios; además se presume que mantenía bajo su mando a 250 personas de la organización criminal a la que pertenecía.
También se dio a conocer que al momento de ser detenido le fueron asegurados 250 gramos de cristal, 36 dosis de cristal, una báscula gramera, dos cuadros de marihuana de cinco kilos cada uno, 16 dosis de marihuana, dos cargadores de arma larga sin abastecer, un fusil M16 calibre 5.56, marca Bushmaster, sin matrícula, y un vehículo Jeep Grand Cherokee.
El 300 también fue detenido el 15 de septiembre de 2017 y procesado por el delito de portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana y posesión de 100 dosis de cocaína; tres meses después fue condenado a pagar cinco mil pesos como garantía por la pena condicional, que le permitió salir en libertad.
De acuerdo a los archivos judiciales del presunto criminal, a lo largo de los meses obtuvo amparos que le restaron las órdenes de aprehensión, hasta que sólo le quedó una carpeta de investigación por el fuero local que fue cuando finalmente logró su libertad condicional a finales del año 2021.
La Fiscalía General del Estado ya cuenta con información de que el presunto líder criminal se encuentra de nuevo en las filas del grupo criminal, que podría ser parte de los disturbios y los indicadores de inseguridad que se generan por conflictos entre bandas contrarias de los diferentes grupos.