El delegado Estatal de la Secretaría del Bienestar, Juan Carlos Loera de la Rosa, lamentó la manera en la que se notificó y llevó a cabo la no renovación de contratos a cerca de 60 empleados de la Secretaría, que laboraban en Chihuahua capital, que este día tomaron las oficinas de Bienestar ubicadas en la Avenida Ocampo, donde se manifestaron por supuesto despido injustificado.
Loera de la Rosa, informó que este personal dependía de una nómina directamente, de las oficinas en la Ciudad de México y fue a través del personal de dichas oficinas, como se les dio aviso.
"Quiero decirles a estas personas, compañeras y compañeros, que estamos haciendo una gestión para aclarar muy bien este asunto, porque me parece que la forma no fue la correcta", afirmó Juan Carlos Loera.
Señaló que si bien se trata de trabajadores eventuales bajo contrato, que firmaban cada mes o cada tres meses, hubo una "falta de tacto", por el personal de la Ciudad de México, toda vez que de inicio, debieron avisarle a él como delegado, para a su vez tratar el tema en los mejores términos posibles.
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"Pertenecían a una nómina que está cargada en la Ciudad de México y fue allá donde tuvieron esa falta de tacto para comunicarlo por la vía correspondiente, es decir, a través a través del delegado", expuso.
Añadió que pese a lo anterior, "es importante señalar, que las personas a las que no se les renovó el contrato, estaban como trabajadores eventuales para prestación de servicios".
Además agregó que "ellos saben que (con esta modalidad) firman un contrato, algunos por un mes otros cada tres meses, y este contrato es para prestación de servicios".
Loera de la Rosa expuso que derivado de todas las actividades que se han llevado en la Secretaría del Benestar Chihuahua, como la bancarización de personas adultas mayores y demás beneficiarios, fue que se contrató a más personal en algún momento.
Señaló que "hace poco menos de dos años, se hizo esta contratación para atender a esas ocupaciones, porque hubo la necesidad de más personal, pues estábamos teniendo mucho trabajo de captura, y de incorporación".
Añadió que una vez concluido todo este trabajo, y que se ha bancarizado a los adultos mayores, y a una gran mayoría de personas con discapacidad que reciben el apoyo federal, el trabajo ha disminuido mucho, por lo que la necesidad de personal en el territorio, es menor.
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"Nosotros somos un gobierno que también estamos dedicados a evitar los gastos innecesarios", añadió, en el sentido de que ya no era necesario contar con tanto personal.
Sin embargo, afirmó: "también a mí me tomó por sorpresa, porque precisamente esa ampliación que se hizo del personal dependió de las oficinas en la Ciudad de México".
Consideró que pese a ello, y debido a que el personal laboraba en la Delegación a su cargo, se debió manejar la situación de otra manera, dando aviso a él como titular, para "buscar una salida correcta a esto, considero que hubo una falta de tacto de los encargados de este personal".
De momento agregó, "solicito al personal en Chihuahua, que se le explique esta situación, estamos muy agradecidos con ellos y estamos atendiendo".