Trabajadores encargados de derribar y limpiar el terreno donde se encontraba la Calesa en el centro de la ciudad, estiman que para la siguiente semana terminarán con sus labores, derribando lo que queda de los cimientos y trasladando el escombro.
El pasado 12 de enero se inició la demolición del edificio de La Calesa, el cual era uno de los más icónicos en la ciudad, viéndose ahora como un terreno aún con un remanente de cimientos y escombro en los alrededores, quedando apenas una pequeña habitación y un arco de rocas junto a la avenida Colón en la esquina de la avenida Benito Juárez.
Durante el proceso de demolición se ha cuidado que el escombro sobrante no caiga a la calle, de igual forma, con el paso de las semanas se han llevado de a poco los desechos que ya no pueden tener en el lugar para evitar accidente y que este salga volando con las ráfagas de viento que han azotado tan fuerte en la ciudad en las últimas semanas.
Al entrar el terreno, además del escombro y el polvo proveniente de este, aun se puede distinguir lo que queda del piso que años atrás era tan deslumbrante y lujoso para la mayoría de los ciudadanos, quienes en su mayoría han expresado profunda tristeza por no haber tenido la oportunidad de entrar al lugar.
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El señor Alfredo, un ciudadano que toma el camión cerca de lo que era el restaurante La Calesa, comentó que desde su juventud vio como personajes históricos relevantes para la política chihuahuense entraban y salían del lugar, lo que lo llevó a interesarse no solo en la comida sino en lo lujoso que debía de ser dicho lugar para que estas personalidades acudieron.
Asimismo, Alfredo comentó que solo en una ocasión logró llevar a su familia a comer a este lugar, sin embargo, nunca olvidará la ostentosidad y el lujo en el que estuvo rodeado, le entristece que un edificio tan icónico ya sea solo un recuerdo del pasado, espera que lo próximo que se construya en el terreno le llegue a los talones a tan magnífica edificación que ahora es solo escombro y polvo.
La Calesa se remonta hasta los años 1965, pero en el año 2019 justo antes de que diera inicio a la pandemia, decidieron mudar la infraestructura a la zona con mayor prestigio, la cual sería el complejo habitacional denominado D1, donde hasta el día de hoy, continúa en operación bajo la misma exclusividad y elegancia que tanto hizo que se destacara en el pasado.
Hasta el momento se desconoce cuál será el próximo proyecto que se tiene planeado colocar en esta esquina tan concurrida, no obstante, para mediados de la siguiente semana los trabajadores habrán concluido con sus labores de demolición y limpieza, dejando un terreno listo para la construcción.
