El presidente del Sistema Producto Frijol en el estado de Chihuahua, Miguel Ángel Colunga, estimó que se proyecta un año complicado para el cultivo, por la escasez e incremento de precios de semilla y fertilizante, además de que se pronostica un año bajo en lluvias durante los meses de junio, julio y agosto.
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Miguel Ángel Colunga explicó que los últimos tres años han sido muy difíciles para el estado de Chihuahua en la producción de frijol, porque han sido muy secos y no ha habido la suficiente humedad, lo que ha repercutido en que Chihuahua se colocaba en el tercer lugar en producción del país, con 100 mil toneladas; y actualmente ha caído al sexto sitio, entre 30 y 40 mil toneladas de producción. Para este año 2022, los pronósticos de la Comisión Nacional del Agua son que durante los meses de lluvia en junio, julio y agosto son muy bajos, posiblemente no se cuente con suficiente humedad.
“Si los pronósticos son reales, no tendríamos suficiente humedad. Por otro lado, el costo de la semilla y el fertilizante, que son los principales insumos, además de escasez en ambos. No hay semilla certificada, y el precio de la urea y el fertilizante neo 1846 se espera que se encarezcan más por el conflicto en Ucrania, de donde se importa principalmente. Con la guerra, va a incrementar precios”, acotó.
Para finalizar, refirió que en el tema de precio del frijol al productor, es de 16 pesos por kilogramo cribado y envasado -en presentaciones de 40 kilos-, en referencia del precio de garantía que da Seguridad Alimentaria Mexicana, Segalmex, que abrió varios centros de recepción de compra y acopio.
Fertilizantes
El Grupo Consultor de Mercados Agrícolas informó que el conflicto Rusia-Ucrania agrava la crisis de los fertilizantes en México, considerando que durante 2021 México importó el 62% de sus requerimientos de fertilizantes, mientras que Rusia representó el 27% de las adquisiciones totales, es decir, de los 3.4 millones de tm importadas la participación fue de 912 tm; de este volumen, el 33% fue de urea. Por lo que el alza de precios de fertilizantes, semilla, financiamiento y otros insumos podría limitar la producción del ciclo primavera-verano de este año.