La gobernadora María Eugenia Campos exigió al Gobierno Federal que detenga el flujo migratorio hacia Ciudad Juárez, con el fin de que se pueda afrontar la situación crítica que se vive en la frontera a causa de ese fenómeno.
Campos Galván resaltó la necesidad de establecer una política migratoria, porque solo así podrán actuar de manera coordinada los tres órdenes de gobierno y la sociedad civil, en un mismo sentido, para resolver de fondo la problemática que se agrava y puede generar otra tragedia o estallido social.
“Le pido al Gobierno Federal que detenga el flujo migratorio ya; el tema migratorio en Juárez se ha tornado en una grave crisis humanitaria, y, de acuerdo a los datos que tenemos y los acontecimientos de estos días se volverá más grave aún”, subrayó.
La mandataria recordó que desde que comenzaron a llegar los primeros grupos de migrantes, se le pidió apoyo a la Federación para que hicieran uso de sus atribuciones y pudieran detener el flujo, sin embargo, hasta la fecha, no lo han realizado.
“Y mientras las autoridades federales exhiben esta pasividad e insensibilidad que tiene pasmados particularmente a los juarenses, a diario siguen llegando más y más personas”, lamentó María Eugenia Campos.
La jefa del Ejecutivo estatal hizo énfasis en que las organizaciones civiles y religiosas que han atendido y acompañado a los migrantes en su peregrinar, calculan que hay cerca de 35 mil personas varadas en Juárez esperando poder cruzar hacia los Estados Unidos.
Calificó como un fenómeno migratorio grave, pues hay miles de personas desesperadas y no cuentan con las necesidades básicas, como alimento, salud, techo, agua, y demás.
Por lo anterior, reiteró la exigencia para que el Gobierno Federal atienda la problemática que les corresponde, y que trabaje en la detención del flujo migratorio que cada vez empeora la crsis que se vive.