El primer domingo de Adviento, que significa venida, se celebrará el 28 de noviembre. Este es el primer periodo del año litúrgico cristiano, que consiste en un tiempo de preparación para el nacimiento de Cristo.
El presbítero Gustavo Sánchez Prieto, vocero de la Arquidiócesis de Chihuahua, indicó que faltan 90 días para celebrar la Navidad, “El Señor nos llama y nos dice ánimo pueblo entero, manos a la obra”.
Deseó que la Arquidiócesis de Chihuahua pueda vivir y ser testigo del evangelio.
Hay que mencionar que este tiempo es considerado como ideal para la reflexión y perdón. El primer domingo de Adviento se celebra el 28 de noviembre, el segundo el 5 de diciembre, el tercer domingo de Adviento es el 12 de diciembre y el cuarto el 19 de diciembre.
Adviento viene del latín “adventus”, que significa venida. El Adviento es un tiempo de alegría y agradecimiento por el advenimiento de Jesucristo.
Durante el Adviento, en las iglesias y en algunos hogares se coloca la corona de ramas de pino denominada Corona de Adviento, la cual tiene cuatro velas, una por cada domingo. Una a una se van encendiendo cada domingo al hacer oración en familia.
La forma circular de la corona significa que “no tiene principio ni fin”, como el amor de Dios que es eterno. La luz de las velas simboliza la luz de Jesús y el color verde de las ramas representa la esperanza y la vida.
Además la Conferencia del Episcopado Mexicano emitió un decreto para celebrar a Santa María de Guadalupe en el domingo de Adviento que corresponde.
A petición de los Obispos de México, la Sede Apostólica ha autorizado la dispensa que, cuando el 12 de diciembre coincida con un Domingo de Adviento, se celebre la solemnidad de Santa María de Guadalupe. Sabiendo que la Virgen María está claramente asociada al misterio de la salvación y alienta con su ejemplo e intercesión a esperar gozosa y devotamente la venida del Señor.
Para el año 2021, en el cual el 12 de diciembre coincidirá con el III Domingo de Adviento, la Conferencia del Episcopado Mexicano autoriza para que, en las celebraciones con asistencia del pueblo, se puedan usar los textos litúrgicos de la solemnidad de Santa María de Guadalupe, tanto en la celebración de la Eucaristía como de la Liturgia de las Horas.