El director general de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), delegación Chihuahua, Sergio Ambrosio González Rojo, señaló que el Gobierno Federal destinó 580 millones de pesos, lo que “garantiza” el mantenimiento del 90 % de las carreteras federales.
Dijo que los tramos que queden pendientes, se pueden atender con “economías y ahorros”, aunque existe la posibilidad de ampliar el recurso sí se justifica debidamente para este mismo periodo. En caso que no alcance para recarpetear el 10 % restante, se podrían usar “trucos” como riegos de arena que puede servir para unos meses, o riego de chapopote y arena para que las vías queden “tolerables” al menos para un par de años.
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Es evidente la reducción en el presupuesto de la infraestructura carretera, que previamente alcanzaba hasta los 3-5 mil millones de pesos; ante esto, el funcionario explicó que la Federación asigna el dinero cada 3 meses, y luego hace corte. “Antes no había esto y los recursos no se ejercían de manera transparente; aquí (Chihuahua) había tal situación que muchos de estos recursos se fueron a obras y gastos que nunca se hicieron”, expuso.
Derivado de lo anterior –dijo-, hay denuncias ante la Fiscalía General de la República por este tipo de sucesos, por lo que reiteró que actualmente el dinero se dispersa conforme se necesita, al tiempo que reconoció que las carreteras federales registran daños estructurales de años atrás y que necesitan ser intervenidas.
En este sentido, precisó que estos casi 600 millones de pesos se emplearán en las siguientes carreteras: Chihuahua a Juárez, excepto el tramo de cuota; Chihuahua a Delicias, hasta Camargo, Jiménez y la frontera con Durango; mientras que en la vía corta a Parral, y de Parral a Satevó se están presentando ciertos problemas con algunas constructoras foráneas.
Aparte, se está interviniendo en caminos artesanales en cinco municipios de nuestra entidad, en tramos que comprenden de la cabecera a la carretera federal.
En el caso de la carretera Chihuahua a Guaymas, detalló que consiste en una inversión federal directa, esto es, no pasó por la SICT, sin embargo, la dependencia se encarga del proyecto que viene de Bavispe a Las Vírgenes, carretera que se tratara de entroncar con la de Gobierno del Estado.
Cabe recordar que diputados panistas locales habían manifestado que se requerían alrededor de 9 mil millones de pesos para el mantenimiento de todas las carreteras federales en Chihuahua, afirmación en la que no estuvo de acuerdo el titular de la SICT Chihuahua, por considerar que se necesita “mucho menos dinero para rehabilitarlas y mantenerlas bien”.
“A los chihuahuenses nos convendría mejor que pagarán deuda, porque debemos 65 mil millones de pesos. Es politiquería estar declarando esas cosas que no tienen sentido; nosotros con 580 mdp estamos haciendo todo lo que les comenté: artesanales, alimentadoras, dando mantenimiento, vamos a bachear y luego a recarpetear, y ya estamos en la fase de recarpeteo con apoyo de las empresas locales”, apuntó.
El Estado no puede intervenir en carreteras federales
González Rojo indicó que la Federación ya dijo que se aplicarán 580 millones de pesos en diferentes tramos y caminos, entonces en el mismo tramo no se puede poner capital del gobierno federal y del gobierno del estado, que tal vez venga también de la Federación.
“El Gobierno del Estado de Chihuahua sugiere entrar a reparar las carreteras federales; pero ya hay recursos para ello; aparte, para tapar un bache no puede aplicar dinero de dos niveles de gobierno, primero habría que separar los tramos que atiende cada quien y luego ponerse de acuerdo los dos Congresos para que no haya una duplicidad de recursos”, apuntó.
El titular de la Secretaría insistió en que es politiquería el anuncio de la gobernadora Maru Campos, sobre una posible inversión de hasta 10 mil millones de pesos en carreteras, argumentando que es demasiado recurso para poder tenerlo en el “cajón” y destinarlo a dicho rubro.
Luego, criticó que los diputados presentaron amparos contra el presidente de la República y contra la SICT, lo que opinó es improcedente porque este último organismo no decide el destino del presupuesto, sino que lo hace el Congreso de la Unión.
“Para Chihuahua había más dinero, pero dejó de utilizarse y se le fue cortando de 5 mil millones a 2 mil 400 mdp, a mil 200 millones, y ahora andamos por el orden de los 600 mdp, porque no lo utilizan con los plazos que dice Hacienda que pide emplearlo en tres meses”, añadió.
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