En su calidad de titular de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas (CEAVE), Norma Ledezma, explicó que los habitantes de la comunidad de Cinco Llagas, en Guadalupe y Calvo, decidieron no presentar denuncia alguna del tipo penal, por amenazas o agresiones, o que hicieran oficial el desplazamiento forzado.
“Hay una necesidad de salir porque no hay medicamentos, de salir a trabajar a otros municipios, todo eso que es muy válido, pero como tal, la comisión local de atención a víctimas no recabó registro alguno de víctimas por desaparición forzada”, dijo.
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Caso contrario, los poco más de 150 habitantes de la comunidad, ubicada en el municipio de Guadalupe y Calvo, pidieron presencia permanente de los cuerpos de seguridad, toda vez que en el tiempo en que fueron atendidos, recibieron protección de la SSPE, SEDENA, AEI y FGE, los cuales permanecen en el sitio.
“Tuvimos ahí la oportunidad de atender a las familias que están allá, de conocer de voz propia de las víctimas la situación que se está viviendo y lamentablemente esta situación que ya fue dada a conocer por la fiscalía general; de la comunidad de Cinco Llagas y otras comunidades de cierta situación de violencia que se está generando allá”, dijo en entrevista.
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Precisó que no levantaron ninguna denuncia, debido a que nadie de las personas que entrevistaron, dijeron tener una amenaza directa, en el sentido de que hayan llegado a tocar a su puerta e intentar sacarlos de sus casas, para configurar el delito de desplazamiento.
“Sin embargo, si hay una situación de necesidad, de apoyo humanitario, eso es lo que pudimos advertir, sobre todo la inseguridad, pero se quedaron las cuatro fuerzas policiales, ahí, Sedena, Guardia Nacional, Agencia Estatal y la SSPE, las cuatro instituciones están posicionadas ahí, las cuatro instituciones en lo que es el poblado”, dijo.
Norma Ledezma comentó que los enlaces que tienen para enterarse de cualquier situación que acontezca en dicha zona serrana, son el párroco, habitantes e incluso algunos maestros de nivel básico que siguen allá y mantienen la comunicación necesaria.
“Desde la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, a excepción de un registro que hicimos de una persona sin vida, pero hasta ahí, ese sí es un homicidio, pero personalmente estuvimos tocando puertas y nadie nos dijo que hayan sido amenazados”, refirió.