En el Centro de Conciliación Laboral (CCL) llevaron a cabo un programa piloto de capacitación a 36 colaboradores de recursos humanos de una empresa, quienes pertenecen a la iniciativa privada, con el objetivo de brindar herramientas en materia de resolución de conflictos laborales.
Este programa de capacitación y formación constó de cinco temas, donde las y los conciliadores del CCL compartieron sus conocimientos ante los colaboradores de la empresa de donde provienen las personas capacitadas.
Comenzando la formación se explicó a los presentes el contenido de las reformas y adiciones a la Ley Federal del Trabajo del 2019; posteriormente se habló sobre el papel que cumple el departamento de recursos humanos, al mismo tiempo el CCL abordó el proceso conciliatorio prejudicial individual.
Además, en la tercera ponencia de la capacitación se explicaron los beneficios que tiene la conciliación al momento de resolver conflictos laborales, al igual que las buenas prácticas y cómo evitar los errores en este tipo de situaciones.
De los últimos temas que se compartieron, fueron las herramientas de comunicación y de gestión emocional, señalando los mensajes y la identificación de intereses, así como las posiciones que son utilizadas por las y los profesionales de la conciliación de la misma institución.
Esta capacitación fungió como prueba piloto, donde participaron 36 colaboradores del corporativo “Alsuper”, quienes están relacionados con la actividad gerencial y de coordinación del capital humano, mismos que aplicaran estos conocimientos en sus 85 sucursal que se encuentran distribuidas entre Chihuahua, Coahuila, Durango y Zacatecas.
Diódoro José Siller Arguello, secretario del Trabajo y Previsión Social quien, acompañado del director general del Centro de Conciliación Laboral del estado, Fausto Barraza Arvizu sostuvieron una reunión de coordinación con el CEP del corporativo “Alsuper”, Juan Carlos Mares y sus colaboradores en materia jurídica Juan Manuel Domínguez y Rodolfo Lara.
El CCL pretende que con esta prueba piloto sea el comienzo de un programa estratégico que puedan utilizar todas las empresas de la entidad y fortalecerlos en las áreas de recursos humanos y jurídicos, capacitándolos en medios alternos para la solución de controversias, manteniendo así la paz laboral.