Los padres, madres de familia y responsables legales de adolescentes, como corresponsables de las acciones que realizan sus hijos e hijas, también son sujetos sancionables cuando las personas menores de edad cometan infracciones al Reglamento de Justicia Cívica, con sanciones en las cuales el juez cívico que atienda cada caso particular puede imponer desde terapia, trabajo comunitario, multas económicas, entre otras.
Así lo informó el Gobierno Municipal de Chihuahua, que destacó que las madres, padres o tutores son corresponsables de las buenas o malas acciones de sus hijos y deben también ser amonestados.
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Esta atención se brinda a través del Juzgado Cívico para Adolescentes, que tiene el objetivo de atender de manera focalizada a las y los adolescentes que infringen el Reglamento de Justicia Cívica y que estaban propensos a caer en actividades delictivas, y brindar herramientas que alternativas de ayuda.
La autoridad municipal señaló que con el fin de concientizar a los padres de familia de niñas, niños y adolescentes que cometen infracciones al Reglamento de Justicia Cívica, emitirá correctivos también para ellos, al ser corresponsables de las buenas o malas acciones que sus hijos realizan.
La modificación al Reglamento de Justicia Cívica, fue una respuesta ante la estadística de una alta incidencia de faltas administrativas y delitos que eran cometidos por adolescentes de entre 12 y 17 años de edad, propuesta por el alcalde Marco Bonilla, quien presentó la iniciativa de crear un sistema de tratamiento de intervención restaurativa más eficiente que lograra disminuir tal estadística.
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En un análisis de esta problemática, se determinó que los padres y madres de familia, son también responsables de sus conductas, y se modificaron algunos de los lineamientos al Reglamento de Justicia Cívica, otorgando a los jueces cívicos la facultad de emitir órdenes de presentación obligatoria para los padres, madres o tutores.
Entre las sanciones aplicables, fijaron multas económicas, trabajos en favor de la comunidad o la toma de terapias psico-conductuales, que les ayuden a mejorar las relaciones con sus hijos y aprender a responsabilizarse, sobre todo de aquellos que son reincidentes.
Como parte de la iniciativa, fue inaugurado el primer juzgado para adolescentes del país, enfocado en brindarles atención integral para prevenir a toda costa que vuelvan a cometer actos fuera del reglamento o la legalidad; y se encuentra ubicado en la Comandancia Centro de la Policía Municipal, donde cuenta con un equipo multidisciplinario compuesto por un juzgador, un médico, una trabajadora social, un psicólogo, un oficial de acuerdos y agentes de custodia que están presentes durante las audiencias.
“Hemos tenido un resultado muy halagador y positivo gracias a esta iniciativa, pues el poder tener a padres e hijos juntos en una situación de este tipo, aunque sea negativa, ha derivado en un mayor acercamiento entre ellos, para corregir las conductas incorrectas, entre las que solían destacar el provocar molestias, intoxicación, ingesta de alcohol y usar sustancias prohibidas en la vía pública”, explicó Miguel Ángel Villa Acosta, juez cívico adscrito al juzgado para adolescentes de la DSPM.