Creer en el reino de Dios es querer ser generoso como lo es el padre celestial, aseguró monseñor Constancio Miranda Weckmann, arzobispo de Chihuahua al presidir la misa dominical en la Catedral Metropolitana de Chihuahua, donde exhortó a la feligresía a hacer lo que les corresponde, desde el lugar en el que estén.
El jerarca de la iglesia católica señaló que Dios llama a todos y acoge a todos los que tarde o temprano atienden su llamado, “lo importante es trabajar por el reino de Dios”.
Mencionó que la iglesia no está integrada por ciudadanos de primera, segunda o tercera, sino que todos son hijos del mismo padre y por ende todos son iguales, no existen diferencias.
Nos cuesta tanto comprender que nuestro esfuerzo no nos autoriza considerarnos superiores a los demás, Dios nos ofrece su amor a todos y ante él no tenemos ningún mérito para exigir
Monseñor Miranda invitó a los feligreses a tomar en cuenta que Dios es quien llama a su reino y para ello hay que trabajar en su construcción.
Al reflexionar las lecturas de este domingo mencionó que en la parábola del evangelio Dios llama a cada persona para construir el reino en su vida, en su familia, en sus relaciones interpersonales, en el trabajo, en la sociedad y en la iglesia, “Que cada uno haga lo que puede en cada sitio que están que hagan lo que les corresponden”.
Ante ello los exhortó a trabajar por la salvación, trabajar con generosidad sin importar que sea mucho o poco, sin importar que sea menos o más impactante, pero hay que hacer lo que a cada uno le toca.
La comunidad se unió en oración para pedirle a María que les ayude a que su entrega sea generosa y a siempre tener disposición.