Jeferson, su esposa, sus dos hijos y su mascota “Messi” son parte del grupo de 200 migrantes que llegaron a la capital durante esta mañana, quienes se han concentrado en las inmediaciones del campamento ubicado en el bulevar Juan Pablo II, cerca de los patios de Ferromex.
Jeferson acompañado de “Messi” relató que esperaron durante dos días en Torreón, Coahuila para subirse al tren, en ese punto alcanzaron a llenar 3 vagones y otro a la mitad.
Ellos al igual que otras personas en situación de movilidad tienen más de 3 meses desde que salieron de su natal Venezuela, donde la situación va de mal en peor con la falta de empleo, comida y sustento.
Algunas de las personas migrantes decidieron descender del tren en cuanto ingresó a la mancha urbana en esta capital, por temor a que agentes del Instituto Nacional de Migración los devuelvan. Otros siguieron hasta la zona aledaña a los patios de Ferromex, en busca de una esperanza para proseguir el camino, sin embargo se toparon con los rondines de la Guardia Nacional y con la seguridad de la empresa, quienes incluso los corretearon para sacarlos de la zona.
Esta acción los llenó de temor y muchos decidieron salir corriendo hacia la zona despoblada para evitar ser capturados, ya que afirman que les ha costado mucho esfuerzo y dinero atravesar México, donde se topan con extorsiones, secuestros y violencia.
Honduras, Ecuador, Colombia, Venezuela, Guatemala, El Salvador entre otros países expulsan a las personas debido a la crisis que viven, estas personas además advierten que en próximos días llegará una nueva oleada de migrantes, quienes se quedaron en Torreón en espera del tren. En este grupo viaja una gran cantidad de niñas y niños.
Jeferson y su familia salieron de Venezuela hace 3 meses, todos han atravesado la selva y por varios peligros, aunque no tantos como en México. “Messi es parte de la familia, lo tenemos desde recién nacido y no podíamos abandonarlo”.
Messi viaja con la tarjeta de vacunas, tiene 1.5 años, se trata de un perro criollo, que recibe mucho amor de los miembros de la familia, está entrenado y es muy obediente, al grado de que se para al lado de su familia y si hay una persecusión también corre.
Jeferson relata que el perrito también tiene su sueño americano, “Nos lo traemos con la bendición de que nos lo dejen pasar, por eso cargó sus papeles”. Jefferson señaló que en varias partes les han pedido al perro, pero Messi es de la familia. “Cuando nos subimos al tren nos arropamos todos”.
➡️ Únete al canal de WhatsApp de El Heraldo de Chihuahua
La esposa de Jeferson y su hija de 7 años, duermen en una carpa que les dejaron otros migrantes que siguieron su camino, mientras que Jeferson, su hijo de 10 años y Messi hacen guardia y descansan un rato para seguir el camino. El pequeño acaba de cumplir 10 años el pasado 20 de enero, lo único que desea es llegar a Estados Unidos de Norteamérica para ir a la escuela y aprender inglés.
Esta mañana, personal de Medfrut ubicada en la Central de Abastos acudió al área de campamento para regalarles donas y café.
En la zona también se pueden ver los rondines que realizan los elementos de la Guardia Nacional.