El miércoles por la tarde fue localizado el cuerpo de José Ofelio Cervantes Ramos, quien es Presidente Seccional de Bahuichivo, el cual corresponde al municipio de Urique, quien al parecer fue asesinado por distintos disparos de arma de fuego y abandonado en un tramo carretero que conecta del poblado a la comunidad de San Rafael, dentro del mismo municipio.
La Fiscalía General del Estado fue quien confirmó el hallazgo del asesinato del funcionario público, quien falleció de tres impactos de arma de fuego, y a la par fue abandonado en el kilómetro 17 de la carretera que conduce de Bahuichivo a San Rafael, según detalló la corporación que se hizo cargo de atender estos hechos.
También te puede interesar: Presencia de El Chueco mantiene a Urique en la zozobra
El municipio de Urique es conocido como la zona de operación donde José Noriel P.G. El Chueco se hacía cargo de las actividades criminales para el grupo del Cártel de Sinaloa, donde hace casi un año asesinaron a dos sacerdotes jesuitas, Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar, al guía de turistas Pedro Palma y a un joven deportista Paul Berrelleza, todo dentro de la comunidad de Cerocahui.
Bahuichivo, San Rafael y Cerocahui se encuentran interconectadas y están a pocos kilómetros de distancia una de otra, incluso la Fiscalía General del Estado, aseguró la casa de José Noriel, a finales del mes de junio, la cual se encontraba en Bahuichivo, donde mantenía su propiedad, pero también se desplazaba por San Rafael y por Cerocahui, donde le gustaba ver los torneos de beisbol.
José Noriel es uno de los sujetos más buscados en el estado de Chihuahua, actualmente la Fiscalía General del Estado ofrece 5 millones de pesos para quien ofrezca información verídica para poder dar con el paradero del presunto líder criminal, ya que a la fecha no lo han podido localizar, a pesar de que los tres niveles de gobierno se encuentran trabajando en esa zona del estado.
El día 15 de febrero, en una visita a la ciudad de Chihuahua, el Vicario de la Diócesis de Tarahumara, Héctor Fernando Martínez Espinoza, había alertado que José Noriel, continúa desplazándose en la Sierra Tarahumara y que el temor sigue en los pobladores, horas después se cometió el asesinato del Presidente Seccional, quien fue abandonado sin signos vitales en un tramo carretero.
El Vicario explicaba que la gente no está tranquila, que siguen con el temor y que hasta que no logren atrapar al responsable las cosas van a continuar en la incertidumbre para todos los habitantes de Urique, incluso para el gremio eclesiástico, quienes mantienen el temor de realizar sus celebraciones en lugares públicos donde puede haber gente de El Chueco o el mismo criminal.
Los oficiales de la Agencia Estatal de Investigación atendieron el hecho suscitado la tarde del pasado miércoles, por lo cual se desplegó un operativo conjunto en el que participaron el Ejército Mexicano, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado y la Guardia Nacional, a fin de dar con el paradero de los responsables.
La fiscalía inició con las indagatorias, entrevistas y diligencias con el objeto de esclarecer el hecho; además, puso a disposición el número de emergencia 911, denuncia anónima 089 y la plataforma pasaeldato.gob.mx para cualquier información que aporte a la investigación a fin de dar con los presuntos responsables.
Como parte de los primeros resultados y recorridos realizados por los elementos de los tres niveles de gobierno, lograron capturar a dos sujetos que portaban armas de fuego y droga, quienes al momento de la detención se identificaron como elementos de la Policía Municipal de Urique.
Ambos agentes municipales, fueron identificados como Jesús Manuel R. R. y Servando B. M., quienes se identificaron como Comandante y Jefe de Grupo de Seguridad Pública Municipal, respectivamente, mismos que entre sus pertenencias contaban con dos armas de fuego calibre .9mm, una bolsa con más de 2 kilogramos de goma de opio.
A pesar de que ambos son agentes de seguridad, no cuentan con permiso de porte de arma de fuego, toda vez que desde el pasado mes de julio de 2022, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, se hizo cargo de revisar el armamento de la corporación y decidió retirarles las armas de fuego a los agentes municipales.
De acuerdo a la información emitida en ese momento, se determinó revisar las condiciones de las armas de fuego de los agentes municipales, ya que en diversos hechos, habían detenido a sujetos armados externos de la corporación, portando las armas de fuego de los agentes, es decir que no les estaban dando el uso adecuado a las mismas.
A pesar de que estamos a unas pocos meses de que se cumpla el primer año del homicidio de los jesuitas en Cerocahui, las autoridades no han podido localizar a José Noriel, quien sigue siendo buscado por las corporaciones de seguridad para su pronta captura, al igual que los sujetos que colaboran con este grupo criminal.