La verdadera política es un acto de amor lleno de servicio y causas, aunque puede sacar lo mejor y peor de las personas, aseguró María Soledad Pérez Tello, exministra de Justicia y Derechos Humanos en Perú, quien visita la entidad como parte de la Academia Internacional de Líderes Católicos.
En entrevista para El Heraldo de Chihuahua destacó la alianza que existe entre gobierno, iniciativa privada, sociedad civil y academia, donde éstos últimos tres ponen su responsabilidad social al servicio de los demás.
La Academia Internacional de Líderes Católicos es una fundación de derecho privado promovido por el Papa Francisco, que incentiva la formación de líderes a partir de la experiencia cristiana para transformar el mundo social, político y económico.
La exministra es parte de los líderes que visitarán la entidad para compartir sus saberes con los chihuahuenses a través del Seminario Internacional de Liderazgo Católico “La mujer en la vida pública: desafíos, pendientes y oportunidades”.
Destacó que desde hace 32 años hace política, pero hace tres años tuvo su primer acercamiento con la academia de líderes, debido a que la línea entre política y religión la había trazado demasiado gruesa; sin embargo, ha podido descubrir que los valores unen hasta a los enemigos, pues ha podido reunirse con políticos peruanos con los que nunca hubiera pensado tener un acercamiento, pero en los valores también han encontrado las causas y luchas comunes.
Señaló que aunque por 30 años su fe ha sido sólo suya y le ha servido como un ancla para soportar las dificultades que le pone delante la política como es la arbitrariedad, la manipulación, porque está convencida que la política saca lo mejor y lo peor de la gente, “hay que saber cómo sobrevives a lo peor de la gente sin que salga el toro que llevas dentro de ti y te vengues con las mismas armas; cómo soportas esa dureza de la política sin claudicar a tus principios y sin que te quite la fuerza para pelear por el país”.
Reconoció que la política está infiltrada, ya que entra gente por ambición y por mezquindades y la vanidad de la política te come, pero además hay poderes subalternos como son el crimen organizado y narcotráfico, entonces su fe fue siempre la fortaleza y ancla personal, sentido de trascendencia.
Destacó que México tiene muchas similitudes con Perú porque son muchos méxicos, ha podido trabajar en la zona de Veracruz, pero es la primera vez que visita el norte, donde ha tenido una agenda muy nutrida con reuniones con empresarios y organizaciones civiles con quienes comparte la experiencia de Perú, lo bueno, lo malo y lo feo.
En México estuvo en la CDMX donde se reunió con el pensador Luis Felipe Bravo Mena, con quien conversó sobre el pensar sereno, porque los partidos políticos han perdido capacidad de representar a la gente y cómo la ineficacia de la gestión en democracia ha abierto espacios al populismo y dictaduras.
En Chihuahua se reunió con la abogada y activista Norma Ledezma, directora general de Justicia para Nuestras Hijas, con quien compartió el tema de los desaparecidos.
Desde la academia, la exministra ha trabajado 30 años en los desaparecidos en el Perú, y desde la realidad con víctimas desde 2011 se vinculó con las víctimas y familias.
El problema es el mismo al igual que la búsqueda con angustia, con esperanza de encontrar, ya que la angustia de no encontrar el cuerpo no termina con el duelo y es una situación terrible.
“Sufrimos la misma estigmatización, miedo e indiferencia, algo distinto porque en el Perú es relacionado con el terrorismo pero acá es el narcotráfico, pero se estigmatiza a la familia y eso acalla las voces y búsqueda de justicia”.
Marisol pudo conversar con algunas víctimas y el común denominador es la búsqueda de verdad, justicia, reparación y memoria para que la gente no olvide.
“La política para mí, que es servicio, está acompañada de causas con las que yo trabajo, por lo que hablar con una de esas causas me permite escuchar algunos de los casos, dificultades, problemas de judicialización, trampas del derecho que generan espacios de impunidad, hago como que investigo, proceso y sanciono, pero en realidad estoy buscando eludir una sanción internacional”.
Resaltó que Norma Ledezma es una mujer extremadamente fuerte, y el fenómeno es igual de doloroso en todo el mundo.
La excandidata a la vicepresidencia de Perú señaló que durante toda su vida se ha preparado para ser presidente de su país, pero en este momento el país requiere unidad y por ende impulsa una plataforma política que reúna a partidos y movimientos regionales.
“La política para mí es un acto de amor, es como el periodismo, cuando eres periodista de verdad sabes que es un acto de amor, porque expones tu vida, al público a que te maten por algo que estás investigando. Así es la política de verdad sobre todo porque se hace de noche y fines de semana, con lo cual la familia es la que paga los platos rotos”.
Señaló que ser mujer y ser política hace que los cuestionamientos estén sexualizados, no cuestionan la conducta política sino la señalan como mujer, madre, esposa. Además hay que asumir que la crítica no va a ser a tu acción política en términos de eficiencia e ineficiencia. Incluso la mujer recibe críticas hasta por lo que se pone. “La mujer debe sobreprepararse”.
En cuanto a los errores de la política manifestó que se ha permitido la infiltración del narcotráfico, crimen organizado, y no se ha sido escrupuloso para ver a quién se les da el poder.
Ante ello consideró que la política puede ser nefasta porque da poder para transformar, corregir estructuras y cambiar la historia, pero cuando las causas no son las correctas el poder lo usas para perseguir, sojuzgar, llenarte de privilegios, para cambiar las reglas del juego a tu favor. “Eso es muy peligroso”.
María Soledad Pérez Tello reconoce que le gustaría ser presidenta de su país, pero sobre todo quiere que su país tenga unidad, “el momento político demanda unidad. A mí me enseñaron que primero es el país, después el partido y después tú, y lo que hoy requiere el país es unidad”.
Finalmente señaló que si no prioriza al país, su animal político puede salir y tomar decisiones incorrectas.