La detención del capo mexicano Ismael "El Mayo" Zambada, ocurrida el pasado viernes en el estado de Texas, es un asunto de carácter internacional, con impacto en la seguridad nacional mexicana, y en materia del crimen organizado a mediano y/o largo plazo. Ante esto, es necesario que se implemente "una reestructuración en las políticas de prevención, combate y, sobre todo, de prognosis criminal", afirmó el especialista en delincuencia organizada de investigación criminal, José Carlos Hernández Aguilar.
El entrevistado agregó que el término "prognosis" se refiere a que "las autoridades deben tener sumo cuidado en las labores de inteligencia y contrainteligencia de alto nivel, para proteger a la ciudadanía de algún impacto en materia de seguridad pública y, en consecuencia, en materia de seguridad nacional".
Explicó que el impacto en el crimen organizado "definitivamente traerá como consecuencia un reacomodo en los lideratos por parte del Cártel de Sinaloa y, consecuentemente, también en los operandi del famoso 'Triángulo Dorado' y con eso, los estados que lo componen, es decir, Durango, Sinaloa y Chihuahua".
El también presidente de la Federación Mexicana de Criminología y Criminalística señaló que "no significa que en estos días vaya a incrementarse la violencia estrepitosamente en las ciudades que integran esta tríada de entidades federativas, incluso en este 'cuadrado', pues sin duda, también impacta en el estado de Sonora", pero es algo que ocurrirá al cabo de un tiempo.
Puntualizó que "primeramente viene lo que se denomina 'vacatio criminis', que es una especie de temporalidad en el ajuste y reacomodo, es decir, el tiempo que toman los cárteles cuando algunos de sus líderes mueren, cuando han sido detenidos, o cuando ya no participan como jefes supremos de la organización criminal, por lo que existe un tiempo de reacomodo para ver quién va a tomar el liderazgo".
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Explicó que en este sentido, se entiende el hecho de que las consecuencias de la detención de Zambada no son inmediatas, sino que serán al cabo de un tiempo, en el que se presentarán "acomodos, traiciones y, sobre todo, la intención expresa de tomar el liderazgo del Cártel de Sinaloa".
Añadió que "obviamente, habrá un impacto en materia de enfrentamiento con otros cárteles, principalmente el Cártel Jalisco Nueva Generación, por la debilidad que empieza a tener el Cártel de Sinaloa".
El doctor José Carlos Hernández expuso que existen tres tipos de cárteles: los de inicio, los de encumbramiento y los cárteles en decadencia, y el "Cártel de Sinaloa, de no reorganizarse y planificar sus criterios tangiblemente, se entiende entonces que sería ya un cártel en decadencia".
Añadió que "con la detención de Guzmán Loera, los hijos de 'El Chapo' y ahora con la entrega o detención de Ismael 'El Mayo' Zambada, este cártel se encuentra en una etapa crítica en sus liderazgos".
Advirtió que, "si bien es cierto que va a permanecer en el tiempo y en el espacio, también es cierto que se encuentra frágil ante el poderío que han tomado a nivel mundial otros cárteles como el Cártel Jalisco Nueva Generación".
Sobre las políticas públicas, señaló que habrá, de igual forma, un impacto, así como "en la relación bilateral con Estados Unidos, toda vez que dejan entredicho la eficacia y eficiencia de las políticas públicas mexicanas en materia de prevención, combate y persecución de los delitos", sobre todo por el pronunciamiento de la no participación del Estado Mexicano en este hecho.
