“Voltea a verme y siento indignación y coraje, pero también me da escalofrío, en su conciencia no hay arrepentimiento”, relató Adrián LeBarón, minutos antes de iniciar el séptimo día del juicio oral contra Fidencio G. E. alias El Jano.
En la sala 3 de los Juzgados Federales del Centro de Justicia Penal Federal número 1, también conocido como “El Altiplano” se desarrolla el juicio contra El Jano, quien está vinculado a la masacre de los integrantes de la familia Langford-LeBarón en Bavispe, Sonora, donde Adrián permanece para participar en cada audiencia, ya que afirma que le ha impresionado la capacidad de organización que tiene el crimen.
El padre de Rhonita Miller LeBarón señaló que durante estos días de juicio han pasado varios testigos, que han podido dar cuenta de como El Jano, quien era parte de la comunidad, se convirtió en un delincuente, que se dedicó a atemorizar a los ciudadanos de la zona noroeste del estado.
Adrián LeBarón destacó que en esta audiencia sólo se están presentando las pruebas para acreditar el delito de delincuencia organizada, por lo que se han presentado varios testigos que lo acusan de ser “halcón” para el grupo criminal de La Línea en el poblado de Pancho Villa, incluso testificó Julián LeBarón que El Jano lo detuvo en un retén con la intención de rafaguearlo. Así como él, testificaron varios habitantes de La Mora y las comunidades aledañas.
De la misma manera, explicó que muchos de los detalles y datos del juicio se extrajeron de los teléfonos.
“Una de las cosas que más me impacta es ver cómo los peritos se han preparado para realizar la audiencia, haciendo preguntas específicas sobre las declaraciones que se han obtenido. Son los peritos que hace tres años iniciaron la investigación y se la saben de memoria”.
Además destacó que durante las audiencias se han presentado varias fotografías, donde se revive la masacre y la fuerza que tienen la organización, “En las pruebas se ha podido asentar quién era el encargado, quién le pagaba a quién ,por qué y cuánto”.
Entre los testimonios está el de un ex policía municipal, quien confirmó que cuando estaba en las filas oficiales ganaba 4 mil pesos a la quincena, y cuando se cambió al crimen, La Línea le lavaba esos 4 mil pesos por semana.
En la masacre más de 10 policías y ex policías municipales participaron, así como militares y ex militares del 35 Batallón de Infantería, de acuerdo a los testimonios.
Testificó el alcalde de Bavispe, quien le llamaba Janitos al imputado, ya que lo consideraban un buen muchacho, luego se convirtió en Jano y después en el Coman Jano, para finalmente ser el encargado de la plaza en ese corredor.
“Él trabajaba mucho con la gente de Bavispe, él compraba pastura y fertilizante, que luego se los vendía a la familia Langford”, tenían una relación comercial.
Las investigaciones arrojan que una persona no le quería pagar un auto a El Jano y un hombre de la capital le dijo que la organización podía ayudarle. Logran recuperar el dinero, y posteriormente lo invitan a ser “tirador de marihuana”, luego de cocaína y posteriormente se convierte en “halcón”. Desde el 2017 se convirtió en malandro.
“Este chavo me voltea a ver y se me clava, él no tiene en su conciencia la dimensión del mal que hizo. Me quiere infundir miedo”, comentó Adrián, quien ahora dimensiona que debe de cuidarse porque la organización y la forma en la que operan es muy peligrosa.
Destaca que tiene que entrar en el mecanismo de protección a fin de que se le legitímese como víctima. “Yo soy defensor de derechos humanos y estoy promoviendo el derecho de El Jano a ser juzgado ante el Poder Judicial y un debido proceso”.
El padre de la víctima espera que al igual que El Jano, el resto de los 33 detenidos lleguen a un juicio y a una sentencia. Destacó que este juicio es el escaparate a la labor de la FGE, del Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
Adrián resaltó que son pocos los casos de delincuencia organizada que llegan a un juicio oral, la mayoría queda en juicios abreviados o bien se arreglan en lo oscurito.
Tentativamente el próximo lunes se dicte sentencia. “Yo aspiró a obtener una condena ejemplar para que los jóvenes que están pensando en ingresar al crimen organizado” no lo hagan.
Adrián recuerda que incluso la comunidad le entregó al presidente cartas alegando la inocencia de los detenidos, “A éstos que están siendo procesados los defiende la comunidad”.
Finalmente señaló que es necesario que no se deje al juez solo.