Los casos de personas desaparecidas que se han registrado en la zona noroeste apuntan a ser resultado de disputa entre grupos criminales por la "plaza" en la venta y distribución de droga, específicamente de cristal, afirmó el activista Gabino Gómez.
Señaló que los casos que salen a la luz pública, son aquellos en los que existe un reporte de desaparición por parte de familiares, y luego se boletinan, son de personas que viven en la misma zona donde desaparecen, dentro del mismo estado de Chihuahua.
El entrevistado expuso que estos últimos casos que se han dado a conocer en la zona de Nuevo Casas Grandes, son sólo una parte de lo que realmente ocurre, y se puede atribuir a grupos criminales.
"Nosotros lo vemos como que son los grupos criminales que operan ahí en la zona y coludidos con la autoridad local, sobre todo de ahí del municipio", afirmó Gabino Gómez.
Señaló que “existe una gran movilidad por los controles territoriales y divisiones, se empiezan a pelear las plazas".
Añadió que "desconozco la composición de los grupos criminales en la zona, pero por las vísperas de lo que pasa en otros lugares, podemos atribuir esta situación".
"Aparte están los que no salen a la luz porque no hay reporte de desaparición", y se trata de personas de otros estados o del centro y sur del país que llegan a la zona en busca de pasar a cumplir el llamado "sueño americano".
Estos casos, confirman esa cifra "invisible", pues no se conocen debido a que no existe reporte por parte de sus familias, pero señaló, no es una situación nueva el que son víctimas de traficantes de personas.
Añadió que la zona de Nuevo Casas Grandes es considerada como corredor de migrantes, quienes son víctimas de todo tipo de vejaciones.
Se les cobra la llamada “cuota de piso”, que no es otra cosa que una extorsión, añadió Gabino Gómez.
"No se puede uno explicar que sucedan tantas cosas sin que la autoridad no esté enterada, es una ciudad muy chica y todo mundo sabe, pero nadie dice nada".
En este sentido, el activista expuso que las desapariciones son una problemática en la que además "no hay expresiones de protesta, de exigencia de las familias". Señaló que se trata de un círculo vicioso "donde la autoridad poco hace si no se les exige, y las familias poco resultados tienen, si no exigen"
Aunque esta situación provoca este círculo en el que ambas partes (autoridades y afectados) se encuentran, Gabino Gómez concluyó que también es comprensible el temor de sufrir consecuencias o represalias, de las personas desaparecidas, lo que vuelve a esto en una situación compleja.