Luego de que se denunció una presunta serie de faltas hacia usuarios de la alberca en las instalaciones del Campus I de la Universidad Autónoma de Chihuahua, además de supuestas malas condiciones de la infraestructura así como la presunta suspensión de un servicio a personas con discapacidades, las autoridades académicas se pronunciaron al respecto; destacando algunas de las situaciones que pudieron llevar a un malentendido y enfatizando en que el servicio se seguirá prestando de manera regular a aquellos que lo necesiten.
En ese sentido, Georgina Ortega, coordinadora del Departamento de Fisioterapia declaró “lo que se trabaja aquí es un programa de reeducación física y muscular, hecho para que cualquier persona que ha pasado por fisioterapia pueda continuar haciendo ejercicio de manera controlas, individualizada y prescrita por un médico especializado”, los usuarios de este programa son personas que ya pasaron por el proceso de fisioterapia y deben continuar haciendo ejercicio. El servicio se presta en 20 sesiones mensuales, de una hora cada una y con un precio de 865 pesos.
Los quejosos anónimos señalaban que ellos debían sumergirse en la alberca con una temperatura exacta de 32°C, de lo contrario no les funcionaría el asistir ahí.
La temperatura de la alberca, según detalló —- oscila entre los 29 y 31 grados ya que en la alberca además del programa de reeducación física y muscular también hay nadadores, por ello no se pueden elevar más de eso las temperaturas.
Este programa es para cualquier persona con una limitación funcional, no necesariamente con discapacidad o qué requiera fisioterapia, ya que para ello existe el centro de terapia física de la UACH.
Si bien el servicio debió suspenderse, durante esta semana eso no significa que el mismo no vaya a continuar “es un compromiso con la sociedad como facultad y como institución”, señaló —, la suspensión se debió a razones ajenas a los encargados de estas instalaciones donde la caldera ha fallado y por ello no se ha regularizado por completo la temperatura de la alberca.
De igual manera, Ricardo Santana encargado de la Secretaría Administrativa de la facultad de Ciencias de la Cultura Física, indicó que en los últimos meses se ha hecho una revisión en la infraestructura y destacó que “por el tipo de calderas que tenemos, que ya tienen más de 20 años de servicio, sino es que más, el consumo de gas es bastante alto, de arriba de 100 mil pesos mensuales”.
En ese mismo sentido, los desperfectos que se encuentran en las instalaciones se deben principalmente a los largos años en que se ha brindado el servicio, de igual manera a golpe de vista todo se encuentra en orden y limpio.
Por su parte, el director de la facultad de Ciencias de la Cultura Física, Carlos Javier Ortiz, indicó que “toda instalación necesita de un cierto número de usuarios para estar utilizada y no sub utilizada”, para ello es que se están emprendiendo una serie de campañas de promoción y poder lograr una instalación en mejores condiciones.
Las autoridades académicas concluyen en la necesidad de que la piscina albergue a más usuarios ya que es muy difícil, solamente cubrir el costo del combustible y ahora mismo tienen un total de 130 usuarios.