“Enséñalos a esperar”, es la conferencia que el Dr. Sergio Antonio García Flores impartió en el Teatro de la Ciudad a más de mil 800 personas en un lapso de tres días, a fin de crear conciencia de la importancia y de la armonía en las relaciones familiares, así como en el desarrollo personal-emocional de las y los estudiantes.
Lo anterior, con la intención de prevenir el suicidio y conductas adictivas con el uso de la tecnología, además de coadyuvar en propuestas y pautas de mejora en sus estrategias de estudio, en la responsabilidad y en las relaciones entre pares.
La secundaria 3015 tiene actualmente un aproximado de 700 estudiantes, y según comentó el director de la misma Sergio García, las y los docentes han observado a lo largo del tiempo la necesidad de crear escenarios comunes donde se comparta información útil para su salud mental y emocional, y así poder evitar el abuso y el acoso esocolar y prevenir el suicidio.
Al respecto, el directivo informó que la pandemia hizo que los estudiantes estuvieran expuestos a una cantidad enorme de información que los hace pensar más rápidamente en temas como la sexualidad, las relaciones de pareja, así como el uso y abuso de las redes sociales, lo cual anticipa las etapas de la vida y que los chicos quieran experimentar cosas que antes usualmente se vivían a los 18, 19 años y hoy a los 13, 14 años ya las están viviendo.
Por lo anterior, fue que el equipo de maestras y maestros de la escuela, así como la sociedad de padres de familia diseñaron actividades que intentan promover las convivencias afectivas familiares y dentro del sistema escolar.
El evento fue dirigido a padres de familia y estudiantes, y se recibieron un promedio de 600 personas en cada ocasión; el viernes 14 se recibieron a alumnos y padres de los terceros grados; el sábado 15 a los de los primeros grados y hoy lunes tocó a los segundos grados.
“La intención ha sido ayudar a hacer concientes a las y los alumnos de lo importante que es la convivencia familiar en la prevención del suicidio y la inestabilidad emocional en los estudiantes, pues la ausencia de empatía y convivencia afectiva entre padres e hijos, provoca en los menores adicciones a las redes sociales, a los videojuegos, así como las primeras aproximaciones al uso de tabaco o cigarros electrónicos, por lo que están viviendo de forma muy acelerada sus vidas”, comentó Sergio García.
Es por ello, que tanto las familias, como los docentes, organizaron este tipo de actividades, como una forma de promover el equilibrio entre las convivencias para que los hijos asuman en el momento oportuno las experiencias que vivirán en sus vidas.