“Hemos iniciado el Año Nuevo con una serie de noticias tristes en Chihuahua y en la República, y no podemos sentirnos ajenos a estas situaciones que están reclamando de todos nosotros una actitud muy responsable”, declaró el padre Gustavo Sánchez Prieto, vocero de la Arquidiócesis de Chihuahua, ante los hechos violentos registrados al arranque del 2023.
Destacó que los obispos nos han llamado a unirnos en oración y que, junto con la oración, tiene que haber el trabajo efectivo por la concepción de una mejor relación entre todos, y rescatar a nivel familiar, educativo, en las mismas parroquias, los valores que nos identifican y nos han dado razón.
El sacerdote manifestó que actualmente hay valores que se han descuidado y han quedado relegados, añadiendo que nos hemos centrado demasiado en lo puramente material, y que vivimos en un ambiente marcadamente individualista.
“Con el evangelio de hoy, en la celebración de la epifanía del Señor, y mediante esta manifestación del Señor a toda la gente, qué bueno que la iglesia pueda resplandecer así como sacramento de salvación que llama a todos sin excluir a nadie, es si lo quieren decir así, fiesta de la catolicidad, de la inclusión, nadie está excluido pero todos estamos llamados a recorrer este camino de conversión y de obediencia”, indicó.
Ante esto, Sánchez Prieto apuntó que trascendencia de poder retomar el ritmo de nuestra vida ordinaria, considerando que mañana será el regreso a clases del nivel básico; por lo que lanzó sus plegarias para que el año que comenzamos se pueda enderezar.
“Empezamos con un año de sangre y de violencia, pero esperamos que pueda resplandecer la paz, la armonía a la que Jesús nos está convocando”, expuso en este aspecto.
Cabe recordar que este pasado primero de enero, se registró un motín en el Cereso número 3 de Ciudad Juárez, Chihuahua, dejando saldos fatales; luego, este jueves, se dio en Sinaloa, la detención de Ovidio Guzmán, desatando una serie de actos violentos.
