En un esfuerzo por fortalecer la seguridad y el bienestar de la juventud chihuahuense, el secretario de Seguridad Pública del Estado, Gilberto Loya lideró el cierre de las brigadas preventivas de seguridad escolar en la Secundaria Federal #15, ubicada en la colonia Sol Oriente de la capital.
Esta iniciativa, enmarcada en las acciones de proximidad de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), tiene como objetivo principal crear entornos más seguros y fortalecer el vínculo entre los cuerpos de seguridad y las comunidades escolares.
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Durante la jornada, al menos mil 200 estudiantes de la institución educativa participaron activamente en las dinámicas organizadas por elementos de la Policía de Proximidad. Los jóvenes tuvieron la oportunidad de interactuar directamente con los oficiales, así como con el propio titular de la SSPE, lo que permitió crear un diálogo abierto sobre los temas de seguridad que más preocupan a la comunidad estudiantil.
Uno de los puntos centrales de la jornada fue la implementación de talleres y pláticas diseñadas específicamente para abordar problemáticas comunes entre los adolescentes, como el acoso escolar (bullying), la prevención de la violencia en el noviazgo y la prevención de adicciones. Estos temas, considerados fundamentales en el desarrollo integral de los jóvenes, fueron tratados de manera dinámica y con un enfoque preventivo, buscando no solo informar, sino generar conciencia y herramientas prácticas para que los estudiantes puedan enfrentar estas situaciones.
Adicionalmente, se puso especial atención en aquellos estudiantes identificados con necesidades de intervención, quienes fueron canalizados para recibir seguimiento personalizado. Esto refleja un enfoque integral en el que no solo se busca prevenir, sino también intervenir oportunamente en casos que lo requieran.
Otro de los trabajos destacados durante la jornada fue la recuperación de espacios aledaños a la institución. Estas labores tienen el objetivo de transformar áreas descuidadas en entornos dignos y seguros, en donde los jóvenes puedan sentirse cómodos y alejados de influencias negativas. Estas acciones de mejora física del entorno escolar forman parte de una estrategia más amplia de prevención del delito, que busca evitar la formación de focos de riesgo.
La recuperación de estos espacios no solo tiene un impacto físico, sino también simbólico, pues muestra el compromiso de las autoridades de mantener zonas seguras y saludables, lo que a su vez refuerza la percepción de seguridad entre la comunidad estudiantil y sus familias.
Estas acciones forman parte de la estrategia Centinela, un enfoque impulsado por la SSPE que busca combatir la criminalidad a través de la construcción de vínculos positivos entre los cuerpos de seguridad pública y la ciudadanía. A través de la cercanía con la comunidad, y particularmente con sectores vulnerables como el estudiantil, la filosofía Centinela apuesta por una prevención activa, en la que la policía no solo interviene en situaciones de crisis, sino que trabaja de manera constante para generar confianza y seguridad.