Un jacal construido de lonas, láminas y madera en el lecho del arroyo El Porvenir, a la altura de la calle Mina Los Arrieros, en la colonia Minerales, corre gran riesgo de ser arrastrado por una crecida del afluente, que se alimenta de los escurrimientos de la Sierra de Majalca, al norte del municipio de Chihuahua.
La vivienda improvisada está asentada sobre una especie de islote, que hace una bifurcación en el arroyo, que por el momento permanece seco; condición que podría cambiar en cualquier momento, debido a la temporada de lluvias.
El lugar se puede ver además una gran cantidad de material para reciclar, que va desde auto partes, varillas, tablas, alambres, lonas, llantas, entre otros artículos.
El arroyo El Porvenir es alimentado por la lluvia y captación de agua del Parque Nacional Cumbres de Majalca, afluente que baja del norte, y atraviesa el municipio de oeste a este, a través de este arroyo, que se une con el Río Sacramento.
La actual temporada de lluvias ya ha causado daños a causa de las inesperadas ‘crecidas’, que son grandes cantidades de agua que escurren repentinamente, y provocan que la fuerza y niveles del agua aumenten agresivamente; como ocurrió el jueves pasado en los Ojos del Chuvíscar, donde el agua quebró una instalación en los pozos de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento. Así mismo, la noche del sábado, una crecida en el arroyo de la colonia 11 de Febrero, al sur, provocó el desgajo y desborde del afluente.
Vecinos del lugar manifestaron que temen por la integridad de los habitantes del jacal, sin embargo, argumentaron que es el lugar que tienen para vivir, y que sería muy cruel dejarlos sin hogar.