La libre importación de alimentos no resuelve la carestía, la mejor solución es incentivar la producción para que la oferta regule el precio, afirmó Maurilio Ochoa Millán, presidente de la Unión de Avicultores de Chihuahua.
El empresario avícola externó su preocupación por la libre importación de productos sobre todo porque Chihuahua es un estado libre de enfermedades y ello brinda tranquilidad a los productores y consumidores
Señaló que hay 7 estados de la república mexicana que están libres de enfermedades y no quieren que les afecte la gripe aviar como sucedió hace unos meses en La Laguna, donde un brote de influenza aviar mató a millones de aves, no que significó un golpe muy duro a la producción nacional.
“En vez de abrir las fronteras se debe de incentivar la producción de huevo, pollo, pavo, y sus derivados”, dijo el productor.
El presidente de la Unión de Avicultores destacó que el 52 por ciento de la proteína que se come el mexicano es de origen avícola, por lo que es necesario que se conserve el estatus sanitario y la alimentación de los ciudadanos.
Se pronunció en defensa de la producción nacional porque con la libre importación quedarán a discreción las medidas de bioseguridad.
Maurilio Ochoa resaltó que el Estado si apoya la industria avícola ya que mediante un trabajo coordinado se mantienen las restricciones para que no ingresen aves, productos y subproductos avícolas que provengan de estados libres de enfermedades o que no cuenten con la reglamentación necesaria.
Además mencionó que esta medida adoptada por gobierno federal incentiva una competencia desleal, sobre todo porque países como Argentina y Brasil cuentan con subsidios en los granos, mientras que en México el costo de los granos es sumamente costoso.
La producción avícola se ha vuelto costosa debido al aumento de insumos, situación que se generó a raíz de la guerra entre Ucrania y Rusia, lo que genera que la industria este sufriendo porque tiene márgenes muy pequeños para seguir operando.
Explicó que con los brotes de influenza aviar en el país y en el mundo, se incrementan los costos, porque hay menos oferta de productos. A ello se le suman los altos costos del maíz, la sota y las materias primas para producir huevo, pollo y pavo.
“La mejor alternativa es que cada día se produzca más huevo, más pollo, más pavo, ayudar a los productores a que tengan una mayor oferta y eso podría controlar el mercado”.
Maurilio Ochoa mencionó que la decisión es incorrecta debido a que se puede llegar a sacrificar la industria nacional y depender, aún más, de los productos extranjeros con el peligro que conlleve y la pérdida de empleos.
“Le pedimos a gobierno federal que voltee a ver a los productores nacionales para que la producción crezca y se regulen los precios como se ha hecho desde antaño.