El Congreso del Estado exhortó al Gobierno del Estado a fin de que implemente las medidas necesarias que permitan evitar brotes de tuberculosis dentro de los Centros Penitenciarios de la entidad, principalmente en el número 3, ubicado en Juárez y en donde ya se registraron casos de esta enfermedad.
La propuesta fue presentada por la diputada de Morena, Magdalena Rentería Pérez, quien detalló que, en el reclusorio referido, hay una propagación de tuberculosis; sin embargo, no es algo nuevo, ya que de acuerdo a notas periodísticas desde el año pasado han surgido brotes de dicha enfermedad, que incluso desgraciadamente ha cobrado vidas.
Aunado a ello, también el año pasado, en el Cereso número 2, ubicado en la capital del estado también se detectó un caso, lo que indica que posiblemente las condiciones generales de salubridad en los centros penitenciarios de la entidad son deficientes.
Fue por tal motivo que se solicitó a la Secretaría de Seguridad Pública Estatal actúe de manera urgente en este tema con el propósito de evitar que esta enfermedad se siga propagando, pues coincidieron los diputados en que, al parecer, las medidas implementadas no han sido suficientes.
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La morenista, en su exposición de motivos, se dijo interesada en el tema dado que, en el diagnóstico realizado por la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) sobre los Centros Penitenciarios, estos salieron reprobado, motivo por el cual ha buscado la manera de favorecer estos espacios a fin de que logren el objetivo inicial.
Igualmente, en ese mismo documento, a relucir la deficiencia en varios aspectos médicos como el que abordó en esta ocasión, así como la falta de abastecimiento de medicamentos, el limitado acceso a exámenes especializados y la dificultad para acceder a consultas con especialistas en distintas áreas médicas, principalmente de psiquiatría.
Es por ello que, logrando el apoyo de sus compañeros de las demás fracciones parlamentarias, se hizo el llamado al Poder Ejecutivo Estatal para asegurar la salubridad en las cárceles, y de esta manera, contar con un ámbito de respeto de los Derechos Humanos de las personas que se encuentran recluidas, así como de sus custodios y demás personal que ahí labora.