Luis Rivera Campos, actual director de la Facultad de Derecho en la Universidad Autónoma de Chihuahua, maestro en Derecho Penal y catedrático por los últimos 25 años, en su oficina evidencia una afición por los deportes, que “si pudiera regresar a una etapa de mi vida sería cuando fui estudiante”.
El aspirante a la Rectoría de la UACh se remonta a un escenario familiar, en el que su padre, el maestro Luis Rivera Soto, quien ha sido catedrático de la Universidad por 56 años y actualmente es decano de la Máxima Casa de Estudios, como su primera referencia a la vida universitaria.
Egresado de la Facultad de Derecho en 1994, indicó que el sueño de muchos universitarios es ser director de su Facultad y posteriormente rector, “yo crecí en un ambiente universitario, mi esposa es universitaria, mi padre y mis hijos lo son y tengo muchas amistades heredadas por mi padre de gente con quien ha tratado por décadas”.
Ha impartido clases como Universidad y Conocimiento, Derecho Procesal-Penal, Introducción al Derecho, y más recientemente Teoría del Delito, con el libro de su padre, el catedrático Luis Rivera Soto.
El tiempo apremia; en agosto habrá rector
El directivo y aspirante a la Rectoría de la UACh indicó que los tiempos dan para que en el mismo mes de agosto se elija a la persona que encabezará la Rectoría durante los próximos 6 años; el tiempo apremia, pues el trabajo de acercamiento personal con los 13 directores y la directora de las unidades académicas aún está en proceso: hasta el viernes en la tarde faltaban sólo cuatro colegas con quienes reunirse y anoche mismo dijo vería al titular de la Facultad de Conta para disminuir la cifra y durante el fin de semana juntarse con los otros dos directivos.
“He recibido el apoyo y la empatía de mis colegas, es una regla no escrita el que sea un director quien sea el próximo rector y creo que es un sentimiento muy bonito el que se ha generado que se me proponga como parte del equipo directivo de las facultades”.
Agregó que no ha sido una administración fácil, puesto que los tiempos han obligado a actuar con menos recursos y, por ende, a tener más necesidades, pero resolver este tipo de situaciones es parte del reto.
Lamentó que la Universidad haya bajado en cuestión de calidad educativa, por lo que dijo que la forma de generar ese crecimiento debe comenzar por el reconocimiento y la motivación a los maestros, como la fortaleza de la Universidad, así como el fortalecimiento del deporte, “esa sería nuestra carta de presentación”.
Recordó que se interpusieron algunos amparos por alumnos egresados y profesionistas de manera colectiva contra los cambios a la Ley Orgánica de la UACh al no realizarse en tiempo y forma la consultad que la Ley de Educación señala como obligatoria, “hay que consultar la Ley de Educación, donde dice que se debe hacer una consulta previa para modificar reglamentos y leyes orgánicas, no se dio y es muy importante, pues creo que 30 mil alumnos deben tener algo que decir al respecto”.
Vienen grandes cambios; son momentos emocionantes
La tarde comenzó con una avalancha de mensajes y llamadas por parte de conocidos, familiares y amigos, para darle aliento y ofrecerle su apoyo en esta nueva aspiración: la de ser rector. “En determinado momento vamos a presentar un plan de trabajo que será enriquecido por las y los universitarios”.
Por lo pronto dijo que tiene en mente dos cosas: facilitar los trámites y aplicar de manera práctica el conocimiento y el talento de los universitarios para resolver los problemas de la sociedad actual: “la Universidad se debe a la sociedad y a los alumnos”.
Indicó que en caso de resultar elegido como titular de Rectoría, se apegará a las reformas de la Ley Orgánica recién aprobadas por el Congreso del Estado, e incluso pugnaría por modernizar los reglamentos y la Ley Orgánica misma, para incluir figuras que actualmente no se contemplan, como la Sociedad de Alumnos, la figura del Decano, así como los derechos para grupos vulnerables como comunidades indígenas y LGBT+.
En el tema de la paridad de género, dijo que será muy importante cumplir con ello, pues se dará la oportunidad de ver el talento de las mujeres universitarias y de todas las personas que tengan algo que ofrecer a la Universidad.
“El tema de género debe estar presente en toda la universidad, pues la mitad de la comunidad universitaria son mujeres; creo que compartir espacios beneficia a la Universidad, pues se producirán muchas oportunidades, ya que tenemos catedráticas muy talentosas que estoy seguro que nos darán buenas sorpresas al ocupar estos puestos”.
Finalmente, indicó que con el tema de la gratuidad universitaria que viene acompañado por la aceptación universal en 2024 es un tema muy fuerte, toda vez que el 72% de los recursos los aporta el Estado, entre la Federación y el Ejecutivo estatal, más lo poco que genera la Universidad, “tenemos que prepararnos, porque ahorita la principal limitación es la estructura: tenemos que tener salones, servicios como cafeterías, baños, estacionamientos, pero creo que el talento y el ingenio de las y los universitarios nos llevarán adelante”.