El arzobispo de la Provincia Eclesial de Chihuahua, monseñor Constancio Miranda Weckmann, presidió la solemnidad de María Madre de Dios, este domingo 1 de enero, en el que invitó en su homilía que cada padre y madre de familia, expresara la bendición del libro de Números 6, sobre sus hijas e hijos y sobre su hogar.
En el inicio de su mensaje, recordó a las familias congregadas que este domingo 1 de enero de 2023, se encontraban reunidas celebrando la Eucaristía del Año Nuevo, y que unas horas antes, en ese mismo recinto, se celebraron con acción de gracias los últimos momentos del año 2022.
“Terminamos agradeciendo a Dios Padre bueno todos los beneficios que nos regaló. Iniciamos haciendo nuestras las alegrías y esperanzas, tristezas y gozos de todos los seremos queridos, con quienes recorreremos los 365 días del año que hoy comenzamos. Experimentamos la buena nueva de la salvación, la noticia de que Dios se hizo hombre para salvarnos, y en esta salvación ha tenido una participación determinante, maría, la Madre de Dios y madre nuestra”, expresó Don Constancio Miranda.
En el marco de la solemnidad de María Madre de Dios, el 1 de enero de cada año, expuso que María ha venido a ser el camino de la complicación divina entre Dios y la humanidad, a quien le ha ha dado al Príncipe de la Paz, que con gozo permite recordar el canto de los ángeles la noche de navidad, ‘gloria a Dios en el cielo y paz a los hombres en la tierra de la buena voluntad’.
“Nos invita a pedir que bendiga a todas nuestras familias y a nuestros seres queridos, con la bendición del libro de Números, ‘El Señor te bendiga y te proteja, haga resplandecer su rostro sobre ti, y te conceda su favor. Que el señor te mire con benevolencia y te conceda la paz’. Los invito a que repitamos estas palabras pensando en sus personas más queridas”, exhortó el patriarca eclesiástico.
Sobre el texto de bendición, el padre Constancio dijo que el Señor hace la invitación para que todo padre y madre de familia en el año nuevo, pronuncie sobre sus hijos y su hogar estas palabras.
“Al terminar y comenzar el año, brota de nuestro corazón un sentimiento profundo de agradecimiento y bendición. Estamos en el mejor momento y mejor lugar, la misa, ya que ella siempre es acción de gracias y es siempre súplica”, dijo a la feligresía.
En ese sentido, instó a aprovechar el primer día del año, para llenarse de los dones de Dios y que estas bendiciones les acompañen todo el 2023.
“Que la Virgen María interceda por nuestras necesidades y lleve al niño Jesús los agradecimientos por lo recibido en 2022 y lo que vamos a recibir en 2023”, solicitó en una plegaria.
En las solicitudes de intercesión, expresó la petición por el Papa Emérito Benedicto XVI, quien partió al encuentro del Padre; también, por todos quienes se congregaron en Catedral y pidieron al Señor bendiciones durante el 2023, y por ser el día de la Divina Providencia, la patrona de las hermanas religiosas Misioneras de la Divina Providencia, porque el Señor bendiga a toda la comunidad, a lo que la congregación respondió a una sola voz, como a cada una de la peticiones, “Jesús, Hijo de Dios, escúchanos”.
Para finalizar, el arzobispo Miranda Weckmann se hizo eco de todos para desear un feliz año nuevo y que las bendiciones de Dios se derramen abundantemente sobre todos y cada uno.
