El párroco de la Catedral Metropolitana de Chihuahua se dirigió a la feligresía que se congregó este domingo en la Catedral Metropolitana de Chihuahua, y a nombre del arzobispo monseñor Constancio Miranda Weckmann, les envió un saludo al pueblo católico, en el segundo domingo de ausencia de la misa dominical.
Este domingo se celebra la Jornada Mundial de los Pobres, en la que se dedicó la sagrada eucaristía a ellos, a quienes trabajan por ellos, y al pueblo católico para que no ignore el llamado del servicio a los más necesitados.
“Presentemos juntos con humildad nuestras plegarias a Dios, Padre, escúchanos, y se solicitó a Dios por quienes se han alejado de la Iglesia, por los pobres, para que encuentren en nosotros la presencia del amor de Dios que no les abandona; por los ricos, para que Dios les convierta y los haga generosos; por los que trabajan al servicio de los pobres, para que Dios los bendiga con su amor; por nosotros, para que estemos siempre atentos al llamado del Señor para el servicio. Oremos”, rogaron a Dios.
En su homilía el Padre López, disertó que muchas veces, las personas quisieran que la vida fuera sencilla, sin embargo, el Señor les sigue invitando a seguirlo.
“No nos dice que nuestra vida va a ser fácil, sino que nos dice que aprendamos a luchar contra nosotros mismos y nuestras soberbias. La iglesia nos sigue invitando a que descubramos la virtud de la esperanza, en la meta que buscamos, que es el Cielo, por eso es necesario que sigamos caminando ante un mundo difícil, dificultades, odio, y a criticar mal a los demás, nosotros los cristianos debemos despertar a la fuerza de la fe. Sigamos caminando en el amor, en el servicio, en la entrega generosa”, exhortó el párroco de la Catedral de Chihuahua.
Ante lo anterior, manifestó que en el camino de la fe y el servicio, habrá quienes les van a decir que ellos tienen la solución a todas las dificultades, y que podría llegar la tentación de escuchar a otros profetas; sin embargo, llamó a aprovechar cada domingo como una gran oportunidad de escuchar Su Palabra, y que ésta toque lo más profundo de sus corazones.
“Animémonos a permanecer fieles a su amor, a su Palabra, a su camino”, urgió el sacerdote.
Al hacer referencia a las lecturas, mencionó que en la primera oración nos dice que la alegría más bonita es servir al Señor, este domingo nos invita a celebrar el domingo de los pobres para la gran invitación de servir al Señor, animémonos a servir a Dios a través de los pobres.
En ese sentido, invitó a abrir el corazón; pero aclaró que no para despreciarlos, sino a dar la mirada de Jesús, para tender la mano, con tiempo, cariño, ayudemos a compartir sus mismas angustias y sufrimientos.
“Y cuando uno les da un poquito, contestan y dan una respuesta bonita de agradecimiento, que nos ayuda a seguir en el camino de la vida de servir al Señor”, finalizó el Padre López.