"Tengo 60 años y nunca me había tocado ver una sequía tan fuerte y tan rara como esta, porque además de la sequía hay temperaturas muy altas, totalmente estresantes para las plantas y los animales. Es muy complicado y hay una amenaza latente de crisis alimentaria”, señaló Eraclio Rodríguez Gómez, productor agrícola del municipio de Namiquipa.
Explicó que la falta de lluvia y el exceso de calor impactará en el costo de los alimentos, dado que no habrá mucha producción. A la fecha ya hay reportes en centrales de abastos donde el costo del frijol se ha disparado a 58 pesos por kilo y aún no se entra a la crisis.
El productor avizora que para el mes de marzo la crisis alimentaria estallará, justo en pleno proceso electoral, lo que afectará a todos los partidos dado que ninguno ha mostrado interés por rescatar y apoyar al campo mexicano, que es donde se producen los alimentos que dan sustento al país.
➡️ Recibe las noticias directo a tu celular. Suscríbete aquí a nuestro canal de WhatsApp
Mencionó que no habrá grano para la producción de tortillas, dado que está por cerrarse el ciclo se siembra de otoño-invierno en Sinaloa, donde los productores no han sembrado mucho debido a la falta de agua en las presas y nadie quiere arriesgarse a sembrar y quedarse a medio ciclo sin agua, entonces para los meses de febrero a abril no habrá cosecha.
“De nada servirán los apoyos que da Bienestar, porque los 4 mil pesos que les dan al mes no les alcanzará para comprar los alimentos, la inflación se va a comer la beca”.
El dinero quedará en manos de la iniciativa privada entre los que destacan El Alazán, uno de los principales importadores de frijol, así como Maseca y Minsa para la tortilla.
El productor lamentó que el presupuesto para el campo sea deficiente, pero además que se destine a los programas insignia del gobierno federal como son Sembrando Vida, fertilizantes y Produciendo para el Bienestar enfocados a la agricultura social.
En el presupuesto no se refleja la tarifa eléctrica subsidiada para los agricultores de riego, lo cual fue una conquista de los productores con el Acuerdo Nacional para el Campo que se firmó en el 2002, sin embargo se perdió toda la cuestión de financiamiento.
“Vemos con mucha tristeza un futuro muy incierto, si no cambia el presupuesto la crisis alimentaria en México será inminente y crecerá la dependencia alimentaria del país con EU”.
Yako Rodríguez destacó que se van a tener que importar 700 mil toneladas adicionales de granos.
El productor señaló que el municipio de Namiquipa es uno de los que más producen frijol de temporal, pero hoy no hay nada. También se producían 300 mil toneladas de maíz y este año no van a llegar ni a la mitad.
“Se están perdiendo la mayor parte de las cosechas, y lo que más preocupa es cómo van a sobrevivir los habitantes de la Sierra Tarahumara”, para mantener a la población indígena se requieren 30 mil toneladas de alimento entre maíz, frijol y papa, porque no consumen productos enlatados.
Yako advirtió que la crisis estallará en pleno proceso electoral, donde la gente cómo va querer ir a las urnas con el estómago vacío, con una decepción galopante en temas de alimentación, salud, educación. “Le va a perjudicar a todos los partidos porque ninguno está interesado en enarbolar la defensa del campo, en atender la producción y la alimentación, las cadenas de suministro que acaparan el mercado”.
El productor destacó que en el 2024 aunque se tenga dinero no van a poder comprar nada porque no habrá alimento, “El impacto será fuertísimo y ahora si, pegará primero a los pobres”.