El próximo 25 de agosto se revisará el reconocimiento de las entidades federativas como víctimas de delitos de corrupción, al brindar el carácter de víctimas se reabrirá el caso de corrupción que alcanza a quienes fueron secretarios de estado en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
El amparo que actualmente se encuentra en discusión en la Primera Sala de la Suprema Corte de la Nación busca que a Chihuahua se le reconozca su calidad de víctimas en el caso conocido como Operación Safiro por el desvío de 250 millones de pesos para campañas políticas del PRI.
El exsecretario general adjunto del PRI, Alejandro Gutiérrez Gutiérrez fue uno de los artífices de la Operación Safiro, quien permitió preso en el Cereso de Aquiles Serdán, sin embargo la federación y la entonces PGR a cargo de Roberto Elías Beltrán, arrebataron a Chihuahua la competencia y la calidad de víctima, al señalar que se trataba de recursos federales.
Javier Corral Jurado, gobernador de Chihuahua mostró un oficio girado desde el 2018 donde el gobierno de Peña Nieto a través de Flavio Carlos Valadez, director general de Delitos Financieros y de Diversos de la Procuraduría General de la República, donde manifiesta que el recurso desviado de la Secretaría de Educación, Cultura y Deporte era recurso estatal y no federal.
Ahora se espera que el ministro Alfredo Ortiz Mena, de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación realice su ponencia y la resolución sea en favor de Chihuahua.