La presidente del Congreso del Estado, Adriana Terrazas, precisó estar de acuerdo en que exista un empadronamiento de los migrantes en el país en el que se incluya las profesiones o nivel de estudios con los que cuentan, así como una estrategia precisa que ayude a tener un conocimiento a detalle de las personas en tránsito que atraviesen el territorio nacional.
Igualmente, dijo ser de la idea de que se les debe brindar la documentación a fin de que tengan oportunidad de trabajar durante el tiempo en el que esperan a cruzar a Estados Unidos, “hay gente profesionista que puede ser de utilidad en lugar de que puedan generar inseguridad”.
Por tal motivo recalcó estar de acuerdo en que haya un registro desde el momento en el que ingresan hasta que abandonan el país, así como una estrategia que efectivamente permita recibirlos, atenderlos y para que puedan aportar a la nación. De esa forma, dijo que se les deben de abrir puertas para que los miles de vacantes que se tienen por ejemplo en Ciudad Juárez, puedan ser ocupadas por ellos.
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Por otra parte, no considera que haya una militarización en la entidad; por el contrario, dijo ser una convencida de que la presencia del Ejército ha coadyuvado al Estado, por lo que insistió en que efectivamente se tiene una coordinación por parte de los tres niveles de Gobierno en cuanto al tema de seguridad.
Caso contrario, es el tema de migración, en el que reconoció que efectivamente falta esa comunicación y colaboración entre el Gobierno Federal y Estatal, así como el incluir a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y a la sociedad civil.
Lamentó los “hechos desafortunados” que tuvieron lugar en San Jerónimo en donde al menos seis personas en tránsito fueron atacadas por parte de elementos del Ejército Mexicano quedando como saldo dos fallecidos y cuatro heridos.
En pláticas que sostuvo con el general Saúl Luna, comandante de la 5ta Zona Militar, este le comentó que el hecho pudo haberse tratado de una confusión toda vez que los migrantes hicieron caso omiso a lo señalado por los militares; pese a ello, destacó que fue el propio Ejército Mexicano quien entregó a los responsables a fin de que sean investigados y juzgados.