La dirigencia estatal de Morena, por medio de su presidente en el Estado, Brighite Granados De La Rosa, manifestó su respaldo hacia Cuauhtémoc Estrada Sotelo, coordinador de la bancada dentro del Congreso del Estado luego de ser acusado como iniciador de violencia política en razón de género hacia su compañera Adriana Terrazas Porras.
Granados De La Rosa señaló que la resolución que emitió el pasado sábado el Tribunal Estatal Electoral (TEE) obedece a una cuestión meramente política que tiene el objetivo de neutralizar a la oposición al gobierno del Estado encabezado por María Eugenia Campos.
La dirigencia morenista reafirmó que la sentencia aún no es definitiva, por lo que, tal como lo advirtieron con antelación, será impugnada llegando hasta las últimas instancias buscando que se esclarezca el tema, pues recalcó que esa acción es “un intento claramente político de silenciar a la oposición”.
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Con lo antes mencionado, la morenista insistió en acusar la “flagrante interferencia” que ha habido pro parte del poder ejecutivo estatal en autoridades “supuestamente autónomas” como las instancias electorales y el poder judicial.
Pese a subrayar que son un partido respetuoso de las instituciones, Brighite Granados precisó que “no podemos permanecer indiferentes ante su cooptación y manipulación en beneficio de intereses políticos y en detrimento de la vida democrática de nuestro Estado”.
Fue así como dejó en claro que, como partido y movimiento que son, acompañarán la impugnación que presente el acusado, Cuauhtémoc Estrada ante la Sala Regional de Guadalajara, así como a los demás legisladores en las subsecuentes vías legales que tomarán respecto a este asunto.
Por su parte, Estrada Sotelo no ha mantenido una postura firme al respecto, sino que se limitó a decir que será este martes cuando emita un posicionamiento e informe sobre las acciones en torno a la impugnación que hará respecto a esta sentencia.
El sábado, posterior a la resolución, comentó brevemente ante unos medios de comunicación que no dará ninguna disculpa pública ni ninguna de las otras acciones que se le impusieron hasta en tanto no se agoten todas las instancias, pues insiste en que ni él ni sus compañeros de bancada cometieron violencia política en razón de género en contra de la presidenta del Congreso del Estado.