Miguel N. B., y de Angélica M. M, presuntos responsables del delito de homicidio calificado, en contra de Rigoberto Quintana, fueron vinculados a un proceso penal, toda vez que en el expendio que operaban, encontraron diversos indicios que los relacionaba con e hallazgo del cuerpo.
Bajo la causa penal 3564/2024, ambos sujetos fueron detenidos la tarde del miércoles 11 de septiembre, en un domicilio de la colonia San Rafael por elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), en específico en un negocio denominado Super Six, dónde; de acuerdo a las pruebas recopiladas de cámaras de video, fue ahí donde estuvo con vida por última vez Rigoberto Quintana.
De igual manera, trascendió que en el homicidio del profesor, el cual llamó la atención de la ciudadanía por el tiempo en que estuvo con reporte de desaparición, habría participado un tercer sujeto, del cual ya estarían girando la orden de aprehensión correspondiente.
El reporte de desaparición del profesor de primaria, lo puso la hija desde el 27 de julio, cuando dejó de tener comunicación con él, siendo la última conversación que tuvo, sobre unas cosas que tenía que hacer en el centro de la ciudad.
La víctima contaba con reporte de desaparición interpuesto el 28 de julio de 2024 y tras llevar a cabo la pesquisa por parte de la FGE, el 4 de agosto, agentes ministeriales encontraron la camioneta del profesor, una Mitsubishi gris con placas DT0698B, abandonada en las calles 69 y Calle 19 de la colonia Aeropuerto, debido a que esta unidad había contaba con reporte de robo.
Días después, su cuerpo sin vida fue localizado el 13 de agosto de 2024, a un costado del camino que conduce al seccional El Charco, municipio de Chihuahua. Durante la pasada audiencia de presentación, se dió a conocer el dato de que, tanto el presunto como el ahora occiso, eran compañeros de trabajo por la mañana en la escuela primaria Pedro Leal Domínguez, en la colonia Robinson.
Tras realizar una serie de entrevistas, Miguel N.B., quien es uno de los dos presuntos responsables y que era compañero de trabajo de Rigoberto, ya que daba clases en el mismo plantel educativo, dijo que la última vez que lo vio con vida fue el viernes 26 de julio en la escuela primaria arriba citada.
Agentes ministeriales, llevaron a cabo el 10 de septiembre, una serie de cateos en un domicilio en la calle Tamborel y 21 de la colonia San Rafael que también funciona como expendio de cervezas, para posteriormente cumplimentar las órdenes de aprehensión en contra de Miguel N. B., y de Angélica M. M.
Entre las pruebas presentadas para que les fuera formulada la imputación a los dos presuntos, la agente del ministerio público, precisó que tras revisar varios videos de cámaras de seguridad, descubrieron que, el super six que fue cateado, fue donde estuvo con vida Rigoberto por última vez, además de que, por los períodos en que tenía el cadáver cuando fue localizado, el pasado 14 de agosto, sería ahí donde lo mataron.
En los videos obtenidos de cámaras a los alrededores del negocio,pudieron ver que el profe Rigoberto entró por la noche, por lo que, cerca de las 22 horas, tres sujetos, dos hombres y una mujer, sacaron un bulto de gran dimensión envuelto en plásticos negros y lo dejaron en la cajuela de un automóvil, el cual también fue asegurado, para después dirigirse con rumbo a El Charco, en donde habrían dejado el cuerpo.
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Rigoberto murió a consecuencia de una asfixia mecánica, ya que lo ahorcaron con una cuerda y una tabla con la cual generaron fricción, objetos que dejaron en el cuerpo del profesor. Sobre el móvil del hecho, los dos presuntos refirieron que no declararán, por lo que se apegaban al término de la duplicidad.
