La zeolita sería el mejor aliado para el campo chihuahuense, sobre todo ahora con la sequía, dado que tiene la capacidad de retener agua y ahorrarla, explicó el doctor Héctor Osvaldo Rubio Arias, catedrático e investigador de la Facultad de Zootecnia y Ecología.
Resaltó que a la zeolita se le ha denominado la “roca mágica” y actualmente en todo el mundo tienen muchas usos entre los que destacan la filtración de agua, suplemento alimenticio para humanos y animales, pomadas, arena para gatos y como potenciador de fertilizante.
En este último ya se ha probado en la región de Delicias, donde algunos productores mezclaron la zeolita con la urea y lograron aprovechar al máximo la efectividad del fertilizante. El investigador fue parte de este proyecto que desarrolló la Facultad de Ciencias Agrícolas y Forestales.
En Chihuahua, existen tres minas de este mineral pétreo, una en Aldama y dos en Satevó, de las cuales una ya está comercializando el material para diversos usos.
“Es una roca muy versátil, por ejemplo los alemanes desarrollaron una pomada Detoxsan Paste que actúa bastante rápido para sanar heridas. En el problema de Chernobyl se elaboraron panes y galletas para absorber la radiación en las personas. Actualmente existen suplementos alimenticios con zeolita micronizada”, explicó el doctor Rubio.
En entrevista para El Heraldo de Chihuahua explicó que la zeolita es pariente de la piedra pómez, pero su característica es que tiene cargas negativas, entonces absorben los elementos tóxicos que tienen cargas positivas.
Refirió que se realizó un trabajo que ya se publicó enfocado en mejorar la calidad del agua, para ello fabricaron un filtro con zeolita para limpiar el agua, el proceso continúa con la finalidad de aplicarlo en comunidades que se encuentran fuera del centro urbano, que es donde más se batalla con el agua.
Zeolita en cultivos
El problema de la sequía es recurrente, de acuerdo a los datos estadísticos, cada 10 a 12 años se registra una sequía extrema, por lo que desde el 2022 el doctor Rubío advirtió del fenómeno, sin embargo no se tomaron las medidas necesarias.
Ahora este 2023 la sequía fue extraordinaria y es necesario contar con algo que ayude a minimizar el uso del agua, por lo que la zeolita puede ser la opción.
Refirió que en coordinación con la Facultad de Ciencias Agrícolas y Forestales se aplicó zeolita a un cultivo de alfalfa. La zeolita retiene mucha agua, son pocos los países que la utilizan para el ahorro de agua en los cultivos.
En 1953 los japoneses iniciaron con el uso de la zeolita, pero lo enfocaron a los olores, es decir, lo usan en las plantas de procesamiento de pollos y cerdos.
De manera recurrente se usa en los areneros de los gatos, porque la roca absorbe el orín del gato y las heces, con una pala se retira y no causa olor.
En Chihuahua se requiere de agua y en la periferia mejorar la calidad de agua que consumen, sobre todo en las zonas donde aún no cuentan con servicio de agua entubada y que usan grandes contenedores que abastecen a través de pipas.
La roca es relativamente barata y que en el campo podría ser una solución, sobre todo porque la mayor cantidad de agua la usa el sector agrícola, “Lo que hicieron muchos productores este año es combinarlo con urea y lo aplicó en el suelo”.
Ello luego del incremento en los insumos sobre todo en cuestión de fertilizantes, donde la tonelada pasó de 7 mil a 24 mil pesos, una de las desventajas que tiene la fertilización nitrogenada como es la urea es que se pierde el 50 por ciento al evaporarse, pero como la urea tiene carga negativa la zeolita la absorbe y está más tiempo disponible.
Resaltó que la UACh iniciará un programa más agresivo para fomentar el uso de la zeolita para contrarrestar efectos de la sequía, así como fuente para descontaminar agua.
A la fecha se aplica en cultivos de alfalfa y nogal, se ha demostrado que si aplican 5 toneladas por hectárea se ahorra muy buena cantidad de agua. En otros cultivos se aplicaron 10 toneladas por hectárea y el rendimiento fue mayor, además de que el suelo conserva la humedad. Son cultivos perennes y la idea es que se aplique en cultivos anuales para ver el ahorro del agua.
Además algunos ganaderos lo están suministrando como suplemento al ganado lo que genera un incremento en el sistema inmunológico.
Explicó que al aplicar un 2% de zeolita en la dieta de los animales se mejora el sistema inmunológico para que soporten mejor el frío. Esto ya está documentado en varios países. El proyecto de zeolita lo desarrollaron con la Facultad de Ingeniería con la doctora María de Lourdes Villalba, para ello visitaron las minas del país, pudieron percatarse que en el estado de Puebla hay dos minas que están vendiendo para las gallinas ponedoras y exportan a Honduras para cuestiones agrícolas y pecuarias; en San Luis Potosí están adelantados en el desarrollo de suplementos para humanos; en Chihuahua una de las minas de Satevó ya está comercializando la zeolita para diversos fines.
Agua para Chihuahua
El principal problema que tiene Chihuahua es la falta de agua, sin embargo la entidad cuenta con grandes bosques que son generadores de agua la cual beneficia directamente a Sonora y Sinaloa, por lo que afirma que es necesario realizar obras hídricas en la parte alta de la cuenca para que el agua sea en beneficio de Chihuahua.
El investigador afirma que a la fecha no existe la voluntad política para remediar la situación, ya que han buscado emprender proyectos que no son factibles, desde traer el agua de la presa Luis L. León hasta extraer el agua de la mina en la zona conurbada, cuando en realidad sólo basta con aprovechar el agua que llega al Valle de Zaragoza.
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Lamentó que no se haga nada en la parte alta de la cuenca, “En mis conferencias siempre digo que Chihuahua tiene mucha agua, el problema es que por naturaleza se va hacia Sonora y Sinaloa, lo usan en el Valle del Mayo y en el Valle del Yaqui, pero ¿Por qué no bajar una cuenca para Chihuahua? Si bajamos una cuenca inundamos Cuauhtémoc y una parte de Chihuahua, pero nunca se ha hecho”.
Destacó que con una nevada ya se hubiera podido obtener suficiente escurrimiento de agua.
La propuesta es que se desarrolle infraestructura necesaria para bajarla del Valle de Zaragoza, son 80 kilómetros y el agua bajará por gravedad. Aunque se trata de un proyecto costoso vale la pena porque el agua es del río, sin duda costará menos que descontaminar el agua de una mina.
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