Padres y madres familia de la Escuela Secundaria Estatal 3020 cerraron la escuela de manera indefinida para exigir buenas aulas para los estudiantes, debido a que cuentan con aulas móviles donde el calor es insoportable.
Los padres denunciaron que los grupos de primer grado cuentan con aulas móviles, mientras que los de segundo y tercero con aulas que no tienen con las condiciones necesarias, por lo que exigen a las autoridades que los atiendan.
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“Le pedimos apoyo a las autoridades, queremos que la gobernadora Maru Campos nos atienda, también el alcalde y la secretaria de Educación”, dijo uno de los padres, quien aseguró que la directora Imelda Ríos no ha atendido las demandas de la comunidad escolar y por ello, también exigen su destitución.
En la manifestación, a la que convocaron los padres de familia, señalaron que la escuela tiene poco más de cinco años en el fraccionamiento Palma Real, ello, tras haber sido reubicada de la colonia Santo Niño, pero a la fecha no cuenta con las escrituras del terreno donde se asienta.
Los manifestantes pidieron a las autoridades que se les brinde una explicación de la situación, debido a que una de las excusas que se pone para realizar mejoras a la escuela es que no tienen escrituras. La única mejora que se ha hecho en la escuela es la construcción de un domo.
“Ya nuestros hijos sufrieron el frío en las trailas, ahora están padeciendo por el calor”, dijo una de las madres de familia, quien relató que las condiciones de la institución son precarias. En tiempo de frío no pueden prender los calentones porque se va la luz y en el calor las trailas tienen aire, pero no da abasto, porque también tienen el riesgo de quedarse sin luz.
En cada aula móvil hay 30 estudiantes, al inicio solo contaban con tres primeros, luego abrieron un cuarto grupo debido a la alta demanda que se presenta en la zona, sin embargo, la traila llegó sin mobiliario y los mismos padres y profesores tuvieron que acondicionar algunas de las bancas inservibles.
A la fecha, siguen recibiendo estudiantes e incluso hay una lista de espera, ya que la escuela brinda servicio a fraccionamientos nuevos que poco a poco se van ocupando. Atienden a alumnos de Vistas del Norte, Riberas de Sacramento, Molino de Agua y varias otras colonias aledañas.
Otra de las exigencias de los padres de familia es que a los docentes se les brindan las plazas, ya que hay varios interinos a quienes no se les paga.
A pesar de que los padres de familia se acercaron con la directora para plantearle la problemática y ver posibles soluciones, la directora no los quiso atender. “Las autoridades educativas nunca nos han dado la cara, exigimos respuestas y que no nos sigan dando excusas”.
La escuela seguirá cerrada hasta que se les brinde atención y les den un folio para dar seguimiento a las acciones de mejora que se plantean.
