Compra Grupo Proceso institución bancaria

Con la autorización de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), a través del Banco de México (Banxico), el grupo de 95 accionistas que integran Grupo Progreso y que en el pasado impulsaron la creación del Banco Unión Progreso, con sede en Delicias, Chihuahua, adquirieron mediante un contrato de compra-venta la institución de banca múltiple denominada “Bankaool”, creada en 2006 como una sociedad financiera de objeto múltiple enfocada al sector agropecuario.

Por lo anterior, a partir de ahora Bankaool será operada por Grupo Progreso, cuya meta es que este banco inicie operaciones en la entidad durante los primeros días de febrero para lograr ofrecer, al término de sus primeros 12 meses de operaciones, un abanico de servicios a la par de aquellas instituciones bancarias ya establecidas.

En rueda de prensa para anunciar los pormenores de la adquisición de Bankaool, el director general de Unión Progreso, Sergio Segovia Sáenz (quien también fungirá como director general de dicha institución), detalló que las negociaciones para adquirir Bankaool comenzaron en marzo del año pasado, para concluir aproximadamente dos meses después con la firma de un contrato por el cual ahora Grupo Progreso es el propietario de dicha institución, con sede en la Ciudad de México, reservándose el monto de la transacción con el argumento de que fue celebrada entre particulares.

Así mismo, explicó que para la compra los accionistas mayoritarios de Grupo Progreso establecieron compromisos de integración con el resto (entre los que, según aclaró, no se encuentra el exsecretario de Hacienda estatal durante el sexenio de César Duarte Jáquez, Jaime Herrera Corral) de los dueños de las empresas que conforman el grupo, las cuales se integrarán a Bankaool de manera progresiva, mediante la transferencia de activos y pasivos.

“Así, se estará pasando la acaparación de las empresas del grupo y estarán generándose créditos para liquidar las deudas pendientes, y se atenderá a través de esta figura a todos los clientes nuevos”, a los que se añaden los 35 mil clientes y 40 mil cuentas con que ya cuenta Unión Progreso.

Por otra parte, Sergio Segovia descartó que el cierre de Unión Progreso se deba a problemas financieros en las empresas que lo integran, y en su lugar enfatizó que “la salud financiera de las empresas que integran el grupo es evidente a toda prueba”, detallando que las empresas que conforman el grupo terminaron en el año 2017 con activos superiores a los 6 mil 800 millones de pesos, una captación superior a los cuatro mil mdp, y una cartera financiera de 4 mil 400 mdp.

“Las empresas de (Grupo) Progreso ni suspenden ni cancelan operaciones, simplemente se transformarán conforme se transfieran los activos y pasivos al nuevo banco”, declaró, aclarando que como consecuencia de la autorización de la aprobación para adquirir Bankaool por parte de la CNBV, el proyecto para abrir y operar el llamado Banco Progreso fue cancelado en su totalidad.

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“LOS ACCIONISTAS DE PROGRESO TIENEN LA VOCACIÓN DE GENERAR MAYOR INCLUSIÓN FINANCIERA”

A la adquisición de Bankaool, institución que cuenta hasta ahora con más de 380 cajeros a nivel nacional, los representantes del grupo enfatizaron que se añade una alianza con el banco estadunidense Metabank, que cuenta con cerca de 200 mil puntos de servicio en dicho país. Lo anterior, señalaron, con el objetivo de generar una infraestructura institucional que facilite el envío de remesas provenientes de Estados Unidos.

“Vamos por una tajada del pastel que representan los 30 mil millones de dólares que anualmente se transfieren de Estados Unidos a México, de los cuales Chihuahua participa con entre un 2 y 3 por ciento”, mencionó Segovia Sáenz, para luego destacar que una vez comenzadas las operaciones de Bankaool, ofrecerán facilidades a sus clientes como la posibilidad de recibir de uno hasta 800 dólares sin necesidad de contar con un amplio historial, o un horario para el envío de dinero “las 24 horas del día, los 365 días del año”.

Pese a que Bankaool surgió con el propósito de ser “el primer banco mexicano online”, por lo cual durante su tiempo anterior en funciones contaba sólo con una sucursal física, bajo la administración de Grupo Progreso no abandonará el servicio de la banca tradicional, ya que este tiene una proyección inicial de abrir alrededor de 56 sucursales en el norte del país.

Sin embargo, dicha proyección “se irá modificando conforme avance el tiempo y se establezcan los nichos de mercado”, precisó Sergio Enrique Becerra Rodríguez, quien será director general adjunto de Bankaool, y quien enfatizó que con el nuevo banco, “buscamos llegar a donde el resto de los bancos no llegan, para promover una mayor inclusión financiera”, mediante la oferta de productos como cuentas de cheques, tarjetas de crédito, créditos hipotecarios y demás servicios bancarios, que se busca puedan ofrecerse al público en los primeros meses posteriores al inicio de operaciones.

Los directivos rechazaron también que el cambio a Bankaool vaya a propiciar una fuga de clientes o cuentas, ya que según explicaron, la nueva institución ofrecerá mayores condiciones de seguridad, ya que la protección para las cuentas pasará de 25 a 400 mil UDIS. “Para el cuentahabiente o inversionista, será la mejor figura entre las empresas del grupo para invertir”.

“LA CONTROVERSIA EN TORNO A CÉSAR DUARTE ESTÁ ARCHIVADA DESDE HACE ALGUNOS AÑOS”

Respecto a la controversia legal y mediática que acaeció sobre Grupo Progreso luego de que el exmandatario estatal César Duarte fuera señalado por aportar mediante un fideicomiso al menos 65 millones de pesos para “salvar” las finanzas de Unión Progreso en 2012, y la influencia negativa que lo anterior ejerció para el grupo al buscar la apertura del Banco Progreso Chihuahua, los miembros del grupo recordaron que a dicho banco nunca le fue otorgada la autorización para iniciar operaciones de manera formal.

“Para nosotros ese asunto está archivado desde hace algunos años. No queremos entrar en una polémica de esta naturaleza, lo que los accionistas del grupo buscaban ya se consiguió, si aquello afectó o no, eso ya pasó, hoy tenemos en la mano una herramienta que posibilita lo que los accionistas han buscado desde 2008: un medio para mayor inclusión financiera y desarrollo para el estado”, declaró al respecto Sergio Segovia Sáenz.

Previo a la cancelación del proyecto en favor de la adquisición de Bankaool, Banco Progreso Chihuahua se quedó en una etapa previa al inicio de operaciones por motivos “no técnicos” (según señalaron Ernesto García Castillo y Armando Bermúdez Quiñónez, también miembros de Grupo Progreso) después de cinco años de haber sido autorizada una licencia, expedida en marzo de 2014, esta nunca recibió la autorización para iniciar operaciones de manera formal.

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